La cáscara de naranja podría ser clave en la prevención de los infartos
Algunas bacterias intestinales ayudan a desarrollar enfermedades cardiovasculares
La enfermedad cardíaca es una de las principales causas de muerte en el mundo y en muchas ocasiones identificar a las personas con riesgo de sufrir un infarto es esencial para evitar el fatal desenlace. Stacy Baird, cardióloga de la Universidad de Columbia, explica que el corazón es esencialmente dos bombas simultáneas. El lado izquierdo recibe sangre oxigenada de los pulmones y la bombea al resto del cuerpo, que utiliza el oxígeno. El lado derecho del corazón recibe la sangre que ha circulado por el cuerpo y la bombea de regreso a los pulmones para reponer el oxígeno. Cuando, durante un chequeo, se identifican problemas con el músculo o las válvulas del corazón, estas se pueden reparar antes de que se vuelvan irreversibles.
Hay muchos elementos de estilo de vida asociados con la enfermedad cardíaca. Hacer ejercicio, una correcta higiene de sueño, controlar el estrés y llevar una dieta saludable son fundamentales para evitar problemas.
Extracto de cáscara de naranja
Investigaciones recientes han demostrado que algunas bacterias intestinales ayudan a desarrollar enfermedades cardiovasculares. Cuando se alimentan de ciertos nutrientes durante la digestión, estas bacterias producen N-óxido de trimetilamina (TMAO) que pueden desencadenar un ataque cardiaco. Para reducir la producción de OTMA y trimetilamina (TMA) el equipo del doctor Yu Wang investigaron el potencial de los extractos de cáscara de naranja, ricos en fitoquímicos beneficiosos.
Los científicos probaron dos tipos de extractos: una fracción polar y una fracción apolar. «Si imaginas tu aderezo para ensalada, cualquier cosa en la parte de agua o vinagre es la fracción polar; Todo lo que hay en el petróleo alejado del agua es la fracción no polar», dijo Wang. «Los disolventes que utilizamos no eran exactamente como el agua y el aceite, pero poseen una polaridad similar».
Resultados del estudio
Los resultados del estudio mostraron que el extracto de la fracción no polar de la cáscara de naranja inhibía eficazmente la producción de sustancias químicas nocivas. Los investigadores también identificaron un compuesto llamado feruloilputrescina en el extracto de la fracción polar de la cáscara de naranja que también inhibe significativamente la enzima responsable de la producción de TMA.
«Este es un hallazgo novedoso que resalta el potencial para la salud previamente no reconocido de la feruloilputrescina para reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular», dijo Wang, profesor asociado de ciencia de los alimentos y nutrición humana de la Universidad de Florida.
«Estos hallazgos sugieren que las cáscaras de naranja, a menudo desechadas como desperdicio en la industria de los cítricos, pueden reutilizarse en valiosos ingredientes que promueven la salud, como suplementos dietéticos o ingredientes alimentarios», dijo Wang en un comunicado quien añade: «Nuestra investigación allana el camino para el desarrollo de alimentos funcionales enriquecidos con estos compuestos bioactivos, proporcionando nuevas estrategias terapéuticas para la salud del corazón».