Seis consejos para no tener problemas con los tatuajes en verano
La piel sobre la que se ha realizado el tatuaje tarda entre cuatro y seis semanas en recuperarse
España ocupa el sexto lugar en realización de tatuajes a nivel mundial y son los más jóvenes los que ven con más naturalidad tintar su cuerpo. Sin embargo, este acto que puede parecer inocuo tiene sus riesgos. Los expertos afirman que no cuidarse y limpiar de manera incorrecta la piel tatuada puede implicar la aparición de infecciones, hecho que se traduce en enrojecimiento, hinchazón, dolor y secreción de pus. Además, los tatuajes también pueden causar alteraciones en la piel, como granulomas (nódulos inflamados) y queloides (cicatrices elevadas) en ciertas personas.
El doctor Javier Pedraz Muñoz, dermatólogo del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, explica que tras realizarse un tatuaje «la zona debe limpiarse inmediatamente con un antiséptico o pomada antibiótica, y cubrirse con un apósito oclusivo durante un periodo de entre 2 y 24 horas». Normalmente, se utilizan apósitos gruesos, absorbentes y antiadherentes. Pasado este tiempo y después de haber limpiado el área con agua y jabón, lo mejor es dejar que el tatuaje se seque al aire. «Como prevención, durante 3-5 días se debe aplicar una pomada antibiótica, evitar sobreinfecciones bacterianas. Posteriormente y durante al menos otras dos semanas, es recomendable aplicar una crema hidratante sobre el tatuaje para facilitar la recuperación de la elasticidad en la piel afectada, ya que es bastante frecuente que se desescame. La piel sobre la que se ha realizado el tatuaje estará completamente recuperada en un plazo de unas 4-6 semanas», añade el experto.
Por su parte, Beatriz Nespereira, responsable editorial de CEMP, asegura que es esencial cuidar la piel tatuada durante y después del proceso de curación para mantener la salud y calidad del tatuaje. No hacerlo puede suponer un conjunto de riesgos graves, especialmente durante la época de verano, debido a factores como la luz solar o el sudor.
Consejos para cuidar los tatuajes
- Usar protección solar: lo primero que recomiendan los expertos para cuidar tu piel es usar protección solar. Los rayos UV del sol pueden desvanecer la tinta del tatuaje y dañar la piel. Cuando estés al aire libre, aplica un protector solar de amplio espectro con un SPF de al menos 30 en tus tatuajes, incluso si están completamente curados. Busca una versión a prueba de agua si vas a nadar. Recuerda aplicar de nuevo cada dos horas y después de nadar o sudar.
- Piel hidratada: es necesario mantener la piel hidratada. El calor y el sol del verano pueden resecar la piel. Utiliza una crema hidratante sin perfume para mantener la piel tatuada suave y flexible.
- Evitar el agua salada y el cloro: es recomendable evitar el agua salada y el cloro. Durante el proceso de curación (generalmente de dos a cuatro semanas), evita sumergir el tatuaje en agua, especialmente en agua salada o clorada. Estos pueden resecar la piel y alterar el proceso de curación. Una vez que el tatuaje esté completamente curado, es seguro nadar, pero recuerda aplicar protector solar.
- Cuidado con las rozaduras: la ropa ajustada y áspera puede irritar un tatuaje nuevo. Intenta usar ropa suave y holgada que no roce el tatuaje durante el proceso de curación.
- Buena nutrición: los alimentos que se ingieren también son muy importantes. La buena nutrición e hidratación pueden ayudar a la piel a mantenerse saludable y acelerar el proceso de curación.
- No masajear ni exfoliar la zona: durante la curación, la piel puede empezar a descamarse, similar a una quemadura solar. Aunque puede ser tentador, no exfolies la zona ni retires la piel que se está desprendiendo, ya que podría afectar la curación y la apariencia final del tatuaje.