Los beneficios de leer un libroGTRES

Apague la televisión y lea: una investigación ofrece las claves para reducir el riesgo de demencia

En conductas sedentarias, las actividades sociales o mentalmente estimulantes, como leer o rezar favorecen la salud cerebral

Es esta época del año la mayoría de nosotros tenemos la oportunidad de sentarnos y disfrutar de un merecido tiempo de descanso. Pero, ya sea que elijas el mando a distancia de la televisión o tu libro favorito, esta elección podría tener consecuencias para tu salud cerebral a largo plazo, según afirman investigadores de la Universidad del Sur de Australia.

Al evaluar los patrones de actividad de 24 horas de 397 adultos mayores de 60 años o más, los investigadores descubrieron que el contexto o el tipo de actividad que se realiza es importante para la salud cerebral. Y, en concreto, que algunas conductas sedentarias son mejores para la función cognitiva que otras.

Al analizar diferentes comportamientos sedentarios, descubrieron que las actividades sociales o mentalmente estimulantes, como leer, escuchar música, rezar, hacer manualidades, tocar un instrumento musical o conversar con otras personas, son beneficiosas para la memoria y la capacidad de pensar, mientras que mirar televisión o jugar videojuegos son perjudiciales.

Los investigadores creen que es probable que exista una jerarquía de cómo los comportamientos sedentarios se relacionan con la función cognitiva, en el sentido de que algunos tienen efectos positivos mientras que otros tienen efectos negativos.

La Dra. Maddison Mellow, investigadora de la UniSA, afirma: «En esta investigación, descubrimos que el contexto de una actividad altera su relación con la función cognitiva, y que distintas actividades proporcionan distintos niveles de estimulación cognitiva y compromiso social» y añade: «Ya sabemos que la actividad física es un potente protector contra el riesgo de demencia, y sin duda debería ser una prioridad si se intenta mejorar la salud cerebral. Pero hasta ahora, no habíamos explorado directamente si podemos beneficiar nuestra salud cerebral cambiando un comportamiento sedentario por otro».

Estimulación mental

La investigadora de la UniSA explica: «Descubrimos que las conductas sedentarias que promueven la estimulación mental o la interacción social como leer o hablar con amigos son beneficiosas para la función cognitiva, mientras que otras, como mirar televisión o jugar, tienen un efecto negativo. Por lo tanto, el tipo de actividad es importante».

Si bien el mensaje de 'moverse más, sentarse menos' sin duda es válido para la salud cardiometabólica y cerebral, nuestra investigación muestra que se necesita un enfoque más matizado cuando se trata de pensar en el vínculo entre las conductas sedentarias y la función cognitiva, concluyen los investigadores.