Día Mundial de la Alimentación: ¿es mejor la dieta mediterránea o la dieta japonesa?

Décadas de investigaciones avalan los beneficios tanto de la dieta mediterránea como de la japonesa. Ambas hacen hincapié en una alimentación fresca que huye de los ingredientes muy procesados. Combinadas con ejercicio regular, no fumar y  ni beber alcohol reducen las posibilidades de morir prematuramente por una enfermedad cardíaca o accidente cerebrovascular. Con motivo del Día Mundial de la Alimentación repasamos mitos y verdades de cada una. 

Saludable: sí y no

Los expertos en alimentación coinciden en que la dieta japonesa es saludable. Lo mismo que la mediterránea. Claro está que depende de lo que se coma y la manera en que se haya cocinado. Aunque son alimentaciones en las que priman los alimentos frescos, eso no significa que no haya productos que incluyan entre sus ingredientes conservantes, colorantes, alto contenido en sal, ultraprocesados... 

A diferencia de otras dietas, en la nipona no se da un gran énfasis a los alimentos fritos. Las comidas tienden a cocinarse con métodos más saludables: al vapor, hervidos o encurtidos. Son menos calóricos y grasos que freír. Un apunte: los japoneses tienen las tasas más bajas de obesidad y una esperanza de vida más larga.

No todo es pescado

Por su localización, Japón es un lugar donde sus residentes consumen más pescado, en comparación con otros países asiáticos. Podemos afirmar que su plato estrella sale del mar, pero no es el único. Los mariscos se incorporan a las recetas de muchas formas, ya sea en sushi, sashimi (carne cruda), tekkadon, etc.. A esto hay que añadir otro tipo de sashimi (el de ternera), tempura, yakitori (broquetas de pollo), gyozas (empanadillas)... En el caso del dashi (caldo tradicional), que se hace a menudo con escamas de bonito fermentado, se puede preparar también con vegetales para los veggie lovers.

Si analizamos la dieta mediterránea no existe un estándar. Al menos 16 países bordean el Mediterráneo y los tipos de alimentación varían entre ellos e, incluso, entre las regiones. Más que una dieta es un estilo de vida con factores comunes: mucha fruta, verdura, frutos secos, legumbres, cereales y el aceite de oliva como un alimento clave. En cuanto a los productos lácteos, huevos, pescado y aves se consumen en cantidades de bajas a moderadas.

​Las porciones son razonables

En los restaurantes occidentales, las porciones de comida suelen ser de gran tamaño. Sin embargo, eso no sucede en Japón donde las porciones tienden a ser moderadas, y en lugar de una fuente llena de comida, es más probable que le sirvan pequeños tazones y platos con diferentes cosas. Esto va de la mano con proverbio japonés «hara hachi bu», que viene a decir: 'hay que comer hasta estar lleno en un 80%'.