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Una persona recibiendo una de las vacunas contra el coronavirusGustavo Fring. Pexels

Coronavirus

«Las vacunas son un recurso escaso y limitado, debemos optimizar»

El Doctor en Microbiología Pedro Antonio Jiménez explica a El Debate la efectividad de las vacunas ante ómicron

Pedro Antonio Jiménez Gómez, Doctor en Microbiología por la Universidad CEU San Pablo, explica a este medio la eficacia de las vacunas con la aparición de la nueva variante ómicron la cual ha producido muchas dudas en la población mundial. 

–¿Es efectiva la vacuna?

–Lo veo clarísimo. Las vacunas son efectivas. Pero yo siempre le digo a mis alumnos tres cosas: las vacunas tienen que ser seguras, tienen que ser eficaces y tienen que ser éticas. Hay una cuestión de responsabilidad social, hay que vacunar. 

Todas las vacunas activan una ruta duradera de inmunología que se llama la de las células T. De ella se habla muy poquito, pero que es fundamental. Es una inmunología un poco más perezosa, pero muy eficaz. Es la que da la explicación de que aunque te puedes infectar, la sintomatología que vas a sufrir no es grave.

Todavía es un poco pronto para responder de manera taxativa si sí o si no. Todas las vacunas tienen un efecto sobre las células T y sobre la ruta de inmunidad duradera. De manera que efectos beneficiosos sobre el sistema inmunitario tendrán siempre. 

Otra cosa es que estas vacunas provoquen en la persona la producción de anticuerpos neutralizantes, que son los que van destinados a evitar la infección. 

Ya hemos visto que las vacunas no tienen una efectividad de anticuerpos neutralizantes del 100 %, lo que significa que se seguirán produciendo reinfecciones. La eficacia de la vacuna no solo se mide en número de infecciones, sino también en la calidad de la evolución del pronóstico de la persona que se infecta.

Yo reflexionaría sobre la necesidad de invertir en investigación para anticiparnos a que una situación así vuelva a producirsePedro Antonio Jiménez Gómez, Doctor en Microbiología por la Universidad CEU San Pablo

–¿Cuál es el punto de los refuerzos si las vacunas son menos efectivas?

–Tenemos que tener en cuenta el efecto de la vacuna es principalmente preventivo, no es como otros tipos de fármacos que tratan de paliar la enfermedad o de reducir sus síntomas. La vacuna lo que trata de evitar es la infección. No es el único elemento que forma parte de las reinfecciones. El otro elemento fundamental, como  parte, es el sistema inmunitario propio que tiene cada uno de nosotros. Decir una única pauta sería imposible porque la población es muy heterogénea en la respuesta desde su sistema inmunitario.

Se está hablando ya de tercera dosis de manera masiva, incluso en algunos casos de cuarta dosis. El punto de refuerzo sigue siendo la vacunación. No pasa solamente con el coronavirus y con ómicron, pasa con otros muchos tipos de patógenos en los que se dan dosis de recuerdo. La dosis de recuerdo es algo que se lleva utilizando mucho tiempo.

Ahora bien, como nuestro organismo no está habitualmente expuesto al coronavirus, y supone una novedad, serán necesarias dosis de recuerdo. Esto no hay que interpretarlo como un fracaso de nuestro sistema inmunitario, sino como una adaptación de nuestro medio natural.

–¿Va a volver la vacunación masiva a España?

–Tiene una componente organizativa que a mí se me escapa. Desde luego, lo que sí que se ha demostrado es que los sistemas de vacunación masiva han resultado ser eficaces. Hay que felicitar a quienes lo idearon. Imaginemos que, por ejemplo, surge una nueva cepa de coronavirus, no va a pasar, que escapase al sistema inmunitario tal como lo tenemos actualmente, ahí se correría un riesgo real para la población. En este caso sería conveniente la vacunación masiva, sí. 

–¿Se puede adelantar la dosis de refuerzo?

–El coronavirus y la respuesta inmunitaria que estamos teniendo frente a él, todavía, es muy reciente y no hay estudios de investigación que sean completamente sólidos. La población es muy heterogénea, en cuanto a sus características, y, por lo tanto, hay personas que a lo mejor a los seis meses su recuerdo inmunológico de anticuerpos neutralizante se haya reducido o prácticamente desaparecido, y a otros, sin embargo, les dure mucho más tiempo. 

–¿Se puede inocular la vacuna si se tiene un resfriado?

–Hay dos tipos de razones por los que no debes vacunarte si tienes una sintomatología catarral. El primero es porque se puede producir un empeoramiento de la situación clínica. En segundo lugar, hay una cuestión microbiológica muy importante, si tú estás infectado, tienes una viriasis, puede resultar que al introducir una nueva cepa de virus se produzca una recombinación del virus. Recombinación significa que uno de los virus captura parte de la información del otro.

–¿Después de tener Covid se puede suministrar la dosis de refuerzo?

–Hasta ahora están hablando de un año. También aquí hay un elemento fundamental. No solamente se trata del sistema inmunitario de las personas, sino también la disponibilidad de vacunas. 

Con cierta periodicidad se anuncia la adquisición de nuevos grupos de vacunas y su distribución. Aunque hablemos de decenas de miles de millones de vacunas, sigue siendo un recurso escaso y limitado, porque la demanda a nivel mundial es muy alta, de manera que a veces que hay que optimizar, hay que conjugar primero que hay población que está sin vacunar y, lógicamente, priorizarles, y luego también que no recibimos todas las vacunas que nos gustaría.

Parece que hasta el momento, según los estudios, es razonable plantear que esa dosis de vacunación se haga con una cierta periodicidad, por ejemplo, anual, como se hacen con las vacunas fines estacionales. 

–¿Qué va a pasar estas Navidades?

–Lo primero que tenemos que entender es que una persona vacunada se puede volver a infectar. Es verdad que hay gente ahora mismo, y ensayos, que explican que aunque una persona se infecte la clínica es menor, porque o bien se pasa de manera sintomática, o bien los síntomas son leves. Sin embargo, en epidemiología tenemos en cuenta una cuestión, a mayor número de infectados por probabilidad, mayor número de hospitalizados, y a mayor número de hospitalizados, por probabilidad, mayor número de fallecidos. Es una lotería a la que no conviene jugar, hay que tomar precauciones.

–¿Vamos a volver otra vez a la situación de inicios de la pandemia?

–Se ha especulado mucho sobre esto. No solamente está el coronavirus como virus emergente, existen otros muchos que suponen una amenaza. Algunos conocidos y otros menos conocidos. Hay muchos que podrían emerger. La posibilidad de que un virus zoonotico, de animal, vuelva a pasar al hombre es probable. Esto ya ha pasado en la historia de la humanidad en varias ocasiones en la que se transmite también por vías respiratorias. Puede volver a suceder. 

Ahora, si la pregunta es si vamos a volver al inicio de la pandemia, yo creo que afortunadamente no, precisamente por la eficacia de las vacunas. Si existe la posibilidad de que pueda producirse un brote, de otro virus, que pueda también tener una fascinación pandémica, pues puede que sí. 

También quiero pensar que el coronavirus nos ha enseñado muchas cosas, entre ellas, que no conviene la minimización del riesgo. Al principio de la pandemia se nos decía  que era una gripe. La minimización del riesgo casi nunca ayuda a su solución. En segundo lugar, yo reflexionaría sobre la necesidad de invertir en investigación para anticiparnos a que una situación así vuelva a producirse. Y en tercer lugar, la eficacia de los mecanismos que la sociedad ha sido capaz de articular.