¿Qué se sabe de ómicron? Síntomas, propagación y cuadro clínico de esta variante

La nueva variante sigue avanzando sin descanso por Europa, donde siguen aumentando los contagios día tras día. De hecho, los organismos de salud calculan que, en dos meses, esta nueva cepa se convertirá en la dominante.

Sin embargo, todavía son muchas las dudas alrededor de ómicron. Desde que se notificara por primera vez en Sudáfrica hace tres semanas, los científicos observan con atención la evolución de esta variante que, aunque a priori no parece tan grave como la delta, sorprende por su alto grado de transmisibilidad.

El Centro para el Control y Propagación de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) ha publicado una guía en la que explica todo lo que se sabe de esta variante.

¿Con qué facilidad se propaga?

Es probable que la variante ómicron se propague con mayor facilidad que el virus original del SARS-CoV-2, aunque se desconoce si lo hace con mayor rapidez en comparación con la variante delta. Cualquier persona infectada por ómicron pueda propagar el virus a otras personas, incluso si están vacunadas o no tienen síntomas.

¿Provoca síntomas más graves?

Se necesitan más datos para saber si las infecciones por la variante ómicron, y en especial los casos de reinfección e infección en vacunados, causan una enfermedad más grave o más casos de muerte que las infecciones por otras variantes.

¿Funcionan las vacunas?

Se espera que las vacunas actuales protejan contra casos graves, hospitalizaciones y muertes a causa de la infección por ómicron. Sin embargo, es posible que ocurran casos de infección en personas que están totalmente vacunadas. Contra otras variantes, como la delta, las vacunas siguieron siendo efectivas para evitar enfermarse gravemente, ser hospitalizados o morir. La reciente aparición de ómicron destacó, aún más, la importancia de la vacunación y las dosis de refuerzo.

¿Funcionan los tratamientos?

Los científicos están trabajando para determinar la efectividad de los tratamientos actuales contra la COVID-19. Con base en el cambio en la composición genética de ómicron, es probable que algunos tratamientos sigan siendo efectivos, mientras que otros lo sean menos.