Coronavirus
El efecto nocebo de la vacuna contra la covid
Las expectativas tienen más influencia en la percepción de los efectos secundarios que la dosis
Fatiga, dolor de cabeza, rigidez articular… Son los síntomas que muchas personas han asegurado experimentar tras recibir la vacuna del coronavirus. Sin embargo, personas que habían recibido una inofensiva solución salina también aseguraron padecer estos efectos. Es por el llamado efecto nocebo, el gemelo malvado del efecto placebo.
Un estudio del centro BIDMC de Boston, asociado a la Escuela de Medicina de Harvard, ha revelado que hasta una tercera parte de los efectos colaterales provocados por las vacunas se deben a este efecto nocebo.
A diferencia del placebo, el efecto nocebo se produce por la aparición de efectos secundarias o empeoramiento tras la administración de un tratamiento que en realidad no contiene ninguna sustancia farmacológica.
Según el citado estudio, publicado en la revista Journal of American Medical Association, el 35,2 % de los sujetos que recibieron el nocebo, dijeron sufrir efectos secundarios como dolores de cabeza y fatiga o rigidez en el brazo e hinchazón.
Los investigadores concluyeron que las expectativas de las personas vacunadas tienen una importante influencia en la percepción de los posibles secundarios y no tanto por la medicación en sí.