COVID-19
Encuentran en Shanghái a un anciano vivo en una bolsa de cadáveres camino de la morgue
Varias personas están siendo investigadas en Shanghái después de que un anciano fuera declarado muerto por error, puesto en una bolsa para cadáveres y trasladado por los forenses hasta que los trabajadores de la morgue se dieran cuenta de que todavía estaba vivo.
En unas imágenes difundidas por redes sociales, se ve a los trabajadores del vehículo sacando la bolsa para colocarla en un carro. De repente, se dan cuenta de que está vivo mientras otra persona, presumiblemente un médico del centro, se acerca a examinar al anciano. Posteriormente, este es trasladado al interior.
La Comisión de Supervisión de Shanghái aseguró que cinco funcionarios, incluidos el director de la residencia y un médico, fueron puestos bajo investigación mientras que otro funcionario local fue castigado. Por su parte, los empleados que se dieron cuenta de que el hombre estaba vivo fueron recompensados con 5.000 yanes cada uno.
Este incidente ha conmocionado a la opinión pública china, especialmente entre los residentes de Shanghái, que viven un estricto confinamiento desde hace más de un mes que ha provocado varios incidentes en las calles.
Un medio local se preguntaba qué hubiera pasado si el incidente no llega a ser registrado en una grabación: «Las residencias de ancianos serán los últimos lugares para muchas personas mayores, especialmente para aquellos que estén solos. ¿Quién se atrevería a enviar a sus padres a una residencia ahora? ¿Quién se atrevería a vivir en una residencia de ancianos con tranquilidad?»
En las últimas semanas, se han sucedido las protestas en la ciudad, víctima de la estricta política de covid cero decretada por las autoridades chinas. Pekín está intentando silenciar cualquier muestra de disidencia, pero en las redes sociales se repiten los casos de personas desesperadas por la falta de suministros y comida.
En las últimas horas ha circulado un vídeo de un hombre que detiene un camión en plena calle pidiendo ayuda. «Gente de Shanghái, nadie se preocupa por nosotros. Ayúdame a revelar esto. Soy un trabajador, me voy a morir de hambre», asegura, según la traducción del blog Chuang.
Este martes, China anunció el fallecimiento de 20 personas en la metrópolis oriental de Shanghái, con lo que suman un total de 474 desde finales de febrero. China, que aplica una estricta política de «tolerancia cero» ante la covid, atraviesa una oleada de rebrotes atribuida a la variante ómicron que está provocando cifras récord de contagios no vistas desde el inicio de la pandemia en la primera mitad de 2020.