Erupciones derivadas de la viruela del mono
¿Qué falla para que haya tantos contagios de viruela del mono?
Varios expertos en salud comentan la actuación de la Organización Mundial de la Salud y la insuficiencia de vacunas
En un mes la viruela del mono ha multiplicado por cinco el número de casos en todo el mundo, lo que ha llevado a la Organización Mundial de la Salud (OMS) ante una declaración de emergencia mundial. Varios expertos consultados por la agencia de noticias Efe sostienen que falla la vigilancia epidemiológica, pero además las dosis de vacunas recibidas son insuficientes.
«El aislamiento de los enfermos no se está haciendo muy bien y tampoco el rastreo de los contactos» señala el vicepresidente de la Asociación Española de Vacunología (AEV), Fernando Moraga-Llop. Además, el experto insiste en que las vacunas son otro tema a solucionar, ya que con las 5.000 dosis recibidas hasta ahora en España, donde hay más de 3.000 casos, no se puede vacunar a los contactos.
Moraga-Llop cree que la alerta internacional decretada por la OMS, cuando se alcanzaron los 16.000 casos en 75 países, es «necesaria y adecuada» pero sostiene que llega «un poco tarde y con pocas vacunas».
La alerta se adoptó el pasado 23 de julio ante el aumento de casos. No obstante, según el experto, esta opción se debería haber tomado en la reunión del 21 de junio para así haber ganado tiempo en coordinar y poner medidas para frenar la transmisión, señala.
La viruela del mono no tiene la gravedad de la COVID-19, reúne las características de expansión internacionalVicepresidente de la Asociación Española de Vacunología
Aunque es evidente que la viruela del mono no tiene la gravedad de la COVID-19, reúne las características de expansión internacional, precisa el vicepresidente de la AEV que defiende administrar la vacuna de tercera generación contra la viruela del mono a los que han tenido contactos con infectados y a la población de riesgo.
Entre estos candidatos se refiere a las personas que trabajan en lugares donde ha habido brotes (como las saunas) y personal de laboratorios que tenga contacto con el virus, quienes tienen más riesgo por prácticas sexuales con diferentes parejas o aquellos que están tomando la proxilasis pre-exposición (PrEP) VIH.
Por edades, la vacuna se recomienda administrar a la población entre los 18 y 45 años. A partir de 18 años, según la ficha técnica y el límite de 45 está en relación con el último caso de viruela en 1977, se entiende que los nacidos antes de ese año recibieron la vacuna clásica y están protegidos.
Moragas-Llop añade que se debe administrar dentro de los primeros cuatro días de la exposición al contacto, hacerlo después solo disminuye la gravedad de la enfermedad.
En definitiva, dice, no se trata de vacunar a toda la población porque no es necesario y en caso de que haya que priorizar por escasez de sueros habrá que seguir las recomendaciones que fijan las autoridades sanitarias.
A más incidencia, más vacunas
Para el presidente de la Sociedad Española de Inmunología (SEI), Marcos López Hoyos, la emergencia sanitaria internacional pretende «mentalizar a la población y evitar que los focos se sigan expandiendo».
Sobre las vacunas, López Hoyos coincide en que son insuficientes 5.000 dosis y afirma que si España lidera el número de casos mundiales, deberá tener más dosis para controlar esos brotes.
Hay que conseguir que la gente sea consciente del riesgo en contactos estrechosPresidente de la Sociedad Española de Inmunología
López Hoyos cree que con esta enfermedad se actuó con prontitud desde el principio y se describieron muy pronto las manifestaciones clínicas, pero hay que conseguir que la gente sea consciente del riesgo en contactos estrechos, fiestas multitudinarias como la de Canarias o saunas como ocurrió en Madrid.