Sanidad
Darias aclara que los hospitales y centros de salud no están sujetos al plan de ahorro energético
La ministra ha indicado que serán los responsables y profesionales sanitarios los que adopten las medidas que consideren para llevar a cabo esa eficiencia energética
El Gobierno aprueba límites de temperatura, un apagón de escaparates y monumentos y teletrabajo
A Carolina Darias le ha tocado aclarar como ministra de Sanidad, que los hospitales y los centros de salud quedan exentos del plan de ahorro energético adoptado por el Gobierno de Pedro Sánchez.
La titular de la cartera de Sanidad ha indicado que serán los responsables y profesionales sanitarios los que adopten las medidas que consideren para llevar a cabo esa eficiencia energética y se ha mostrado convencida de que «como siempre se hará un uso responsable».
Darias ha indicado que el Gobierno lo que busca es anticiparse con un plan de ahorro energético «que nos permita enfrentar el otoño y el invierno en mejores condiciones y sin ningún tipo de recortes».
Sánchez tiene un plan
El Ejecutivo aprobaba este lunes el plan de medidas de ahorro energético, en Consejo de Ministros adelantado por la agenda prevista para los miembros del Gobierno durante este martes.
El paquete pretende atacar la crisis energética desde dos vías. Por un lado, busca reducir al 7 % el consumo de gas a través de normas que afectarán especialmente a los edificios públicos, establecimientos, centros comerciales, hoteles o cines, además de recomendaciones para los hogares. Por otro, establece una batería de normas destinadas a reducir el consumo a través del fomento del teletrabajo.
La normativa limita el uso de aires acondicionados en edificios y transportes públicos, centros y establecimientos comerciales, hoteles, cines, estaciones de tren, autobús y aeropuertos a 27 grados y a 19 grados, en el caso de la calefacción.
La norma incluye la obligación -antes de una semana desde la publicación del decreto- de apagar las luces de monumentos, edificios o escaparates sin actividad o antes de las 22 horas. Es decir, aquellos en los que haya concluido la jornada laboral. Para garantizar su cumplimiento el Gobierno se reserva un régimen sancionador.