COVID-19
El multiprometido informe de fallos frente a la covid no verá la luz hasta 2023
Para entonces habrán cumplido un año de retraso mientras los expertos internacionales están sacando los colores a la actuación del Gobierno durante la pandemia
En septiembre de 2020, Salvador Illa se comprometió a realizar un informe sobre la gestión del Gobierno durante la pandemia del coronavirus. Fue su sucesora Carolina Darias quien un año después anunció el comité de expertos encargados de realizar el documento y los plazos. Pero esta evaluación no llegará hasta 2023 por las «trabas burocráticas» y la «falta de agilidad» de las administraciones.
Varios expertos en salud, todos españoles, publicaron un artículo en The Lancet en agosto de 2020 criticando la gestión del Gobierno durante la pandemia. «España tiene uno de los sistemas de salud con mejor desempeño en el mundo y ocupa el puesto 15 en el índice Global Health Security. Entonces, ¿cómo es posible que España se encuentre ahora en esta posición?», se preguntaban en un momento en el que nuestro país lideraba casi todas las estadísticas de contagios y muertes de Europa.
Estos profesionales señalaron entonces la falta de preparación, la reacción tardía de las autoridades, la poca confianza en el asesoramiento científico o a la falta de preparación en los hogares de ancianos. Por ello exigían «una evaluación integral de los sistemas de salud y atención social» para preparar al país para nuevas oleadas o futuras pandemias.
Ciudadanos pidió entonces explicaciones al ministro Illa, quien garantizó que se haría «una valoración de la gestión» cuando fuera el momento apropiado. El Interterritorial acordó la realización de una evaluación y se constituyó un grupo de trabajo del que no se supo nada hasta un año después, en septiembre de 2021, cuando Darias –ya ministra– reveló el nombre de los expertos.
Entonces, el Interterritorial fijó un plazo de cuatro meses para presentar la evaluación. Pero, una vez más, no se volvió a saber nada del asunto. Según Sanidad, el grupo de expertos está esperando la información recopilada por las empresas de recolección de datos.
Ahora, estos expertos han advertido que, en el mejor de los casos, los primeros informes no estarán listos hasta 2023 y señalan que avanzan «con los tiempos de la administración». «Esperamos que sirva para algo, porque se necesitan muchos cambios en muchos ámbitos y, sobre todo, en la salud pública. No se trata de repartir palos a todos, sino aportar ideas que puedan ayudar a mejorar el sistema», señalan fuentes de este equipo a la agencia Colpisa.
Lo cierto es que los informes realizados en otros países del entorno no ahorraron «palos» a la hora de juzgar la gestión. En Reino Unido se habló de «grandes errores», mientras que en Francia se concluyó que el país estaba «mal armado y mal preparado» para hacer frente a la pandemia con un sistema sanitario desbordado y unos retrasos de reacción que facilitó la propagación del virus.
«Medidas equivocadas»
Hace apenas una semana, un nuevo informe en The Lancet firmado por 40 expertos mundiales de reconocido prestigio ponía de manifiesto los graves fallos que durante los dos primeros años de la pandemia provocaron casi 18 millones de muertes evitables.
En el caso de España, el trabajo señala que España cerró muy tarde los vuelos con China, propagando el virus muy rápidamente durante los meses de enero y febrero de 2020. «España reaccionó muy lentamente a principios de 2020 y no estaba preparado para la pandemia. Falló en su comunicación con la población y perdió su confianza al llevar mascarillas por la calle incluso luego cuando se permitió quitarlas en restaurantes y bares. Además, empezó a vacunar a la población muy lentamente y ahora no tenemos un buen plan de cara al otoño-invierno. La gente ni siquiera sabe si debe ponerse una cuarta dosis ni cuándo», apuntan los autores del informe.
«El virus llegó por medio de italianos y de españoles que se movían por el extranjero y se transmitió con la multitudinaria concentración del 8 de marzo. Lo interesante es lo que hizo el Gobierno cuando supo que teníamos un problema y, lamento decir, que las medidas de control eran bastante equivocadas. Incluso mucha burocracia para vender test de antígenos en las farmacias, con vacunar rápido y todos los días de la semana y su manera de comunicar a la población fue bastante confusa y contraproducente», añaden.