Enjuanes culpa al Gobierno del retraso de su vacuna: «Sin apoyo es una tarea casi imposible»

El virólogo Luis Enjuanes vive a contrarreloj. A sus 76 años, con la ilusión de crear una vacuna contra la COVID-19, lidera un equipo de 16 científicos y virólogos (entre los que está Sonia Zúñiga) para erradicar lo que a día de hoy es el principal problema mundial: el coronavirus.

En declaraciones de Enjuanes a Diario Sur acerca de la financiación necesaria para sacar su prestigioso proyecto a la luz, afirma que para los ensayos preclínicos que se hacen en los laboratorios con modelos de animales experimentales no cree tener ningún problema, pero la situación se complica en hacer la prueba en humanos, ya que «para hacer los ensayos clínicos con personas y comercializar la vacuna si no se tiene el apoyo del Gobierno y de una multinacional poderosa eso se convierte en una tarea casi imposible».

En abril del año 2021 salió a la luz que una de las grandes esperanzas españolas para tratar el coronavirus –porque, según aclararon, «ni te contagias de la covid ni transmites»– se iba a testar por primera vez en ratones para comprobar la eficacia y la respuesta inmunitaria. Según apuntaron desde el CSIC en la segunda mitad de ese mismo año se iba a probar en humanos.

En marzo de 2022, Sonia Zúñiga explicó a El Debate que seguían avanzando en los ensayos preclínicos en animales. «Ya hemos demostrado la prueba de concepto con resultados muy prometedores. Pero aún quedan aspectos que optimizar y más análisis que realizar en modelos animales», aclaraba, y comentó que el equipo trabajaba con con la intención de que estuviese lista en el primer trimestre de 2022, pero no ha podido ser así.

Esta vacuna es la única en el mundo basada en un RNA que se autoamplifica derivado del propio virus. El pasado 19 de septiembre desde el CSIC explicaron que ya se habían realizado los primeros ensayos en humanos, por lo que podría estar en su última fase antes de su aprobación.

Enjuanes añadió al medio andaluz que consideraban que su vacuna «permitiría controlar la pandemia, porque tiene, en principio, ventajas sobre las otras. La desventaja es que es un poquito más compleja de producir, pero es una vacuna más completa. Las otras han jugado un papel extraordinario y han salvado muchísimas vidas, pero hay que mejorarlas por dos motivos. Por un lado, la estabilidad a temperatura es muy baja y, por otro, hay que cambiar la ruta de administración y que sea por vía intranasal para que puedan dar una inmunidad esterilizante».

Para finales de 2023

Después de mucha incertidumbre, el virólogo ha situado a finales de 2023 el uso práctico de la vacuna intranasal contra el coronavirus, cuyo prototipo se encuentra actualmente en elaboración.

Luis Enjuanes ha indicado que, «siendo realistas», el prototipo de vacuna intranasal en el que está trabajando el Laboratorio de Coronavirus del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC no podrá tener un «uso práctico» hasta finales del próximo año, dada la «complejidad de la vacuna».

«Llegamos más tarde, pero adaptados a las diferentes variantes», ha destacado Enjuanes, después de indicar que las pruebas realizadas hasta el momento demuestran una «protección desinfectante», antes de pasar a la siguiente fase de ensayos, de momento en macacos y posteriormente en personas.

Sobre los ensayos en macacos, espera que puedan iniciarse este año, aunque para ello será necesario contar con laboratorios fuera de España.

Posteriormente, llegarían los ensayos en personas en España, según Luis Enjuanes, quien ha vinculado los mismos a las «circunstancias geopolíticas», ya que para los mismos se precisa de una financiación importante, para lo que sería necesario contar con la colaboración del Gobierno central y de multinacionales.