Ángel Serrano, investigador científico
«Hay advertencias de que el mal uso de los antibióticos matará a más gente que el cáncer en 2050»
El científico Ángel Serrano, que ha sido elegido por segunda vez uno de los investigadores más influyentes del mundo, ya busca soluciones en su laboratorio para combatir a las bacterias resistentes
Por segundo año consecutivo el científico valenciano Ángel Serrano ha sido incluido en el Top 2 % de los investigadores más influyentes del mundo de la Universidad de Stanford. Con 47 años y seis como director en el Laboratorio de Biomateriales y Bioingeniería del CITSAM-UCV de la Universidad Católica de Valencia, el investigador mira al 2050 con el rigor científico con el que la OMS ha vaticinado el futuro: «Ya han avisado que puede que para ese año muera más gente de bacterias resistentes que incluso de cáncer», recuerda.
El Debate habla con él de este y otros temas que marcan la actualidad científico-médica así como de sus logros en investigación.
–¿Cómo se siente uno viendo su nombre por segunda vez en la lista de los científicos más destacados?
–Para mí es un reconocimiento internacional del buen trabajo que estamos haciendo en el laboratorio porque al final es un trabajo en grupo, aunque yo sea el que dirige. Me gustaría seguir en esta línea y salir todos los años en esa lista.
–¿Qué busca el Top 2 %?
–La universidad de Stanford de EE. UU. publica todos los años una lista con los investigadores más influyentes. Para ello miran las publicaciones que tiene cada científico, las citas a sus artículos por parte de otros científicos, las patentes que ha sacado y hace una clasificación del 2 % de los mejores. Publica esa lista solo con el 2 % de millones de investigadores en el mundo.
–En esta ocasión, estudios relacionados con la lucha contra la pandemia de la COVID-19 le han otorgado este puesto…
–Sí, durante la pandemia hicimos una mascarillas antibacterianas que ya están a la venta e hicimos una serie de estudios en los que demostrábamos que lo que decían de que las temperaturas altas iban a acabar con el virus en verano no era cierto. Este estudio fue citado en muchísimas ocasiones, lo incluyeron en una investigación de Harvard y del EMIT, del Instituto de Massachusetts.
–Además cuenta con cuatro patentes...
–Tenemos una patente que es de unos materiales porosos que sirven para regenerar hueso en caso de fractura o extracción de una parte por enfermedad. Por el momento solo hemos realizado estudios con conejos, faltaría llegar al ensayo clínico para poder empezar a aplicarlo en personas. Por otro lado y en colaboración con la UPV hemos desarrollado un par de materiales que son biodegradables y además con propiedades muy interesantes para aplicaciones biomédicas (regeneración de tejidos, cura de heridas...) y luego todas las aplicaciones que puedan buscarse como sustitución de los plásticos que no son biodegradables y producen contaminación. En esta ocasión ya está patentado pero falta que haya empresas que estén interesadas en desarrollarlo. Por otro lado, hemos desarrollado unas mascarillas antibacterianas desechables, que ya están a la venta y se pueden adquirir a través de la página web de Visormedical y hemos patentado unas pantallas para la protección frente a virus y bacterias resistentes a los antibióticos, que están hechas de un material que cuando el virus o la bacteria toca la pantalla se destruye. Estamos pendientes de empresas que estén interesadas en explotarlo.
–¿Y ahora en qué están trabajando?
–Estamos trabajando en muchos proyectos. Somos un equipo de siete personas. El más destacado quizás es que seguimos trabajando en el desarrollo de materiales que son capaces de destruir virus y bacterias. Las bacterias resistentes a los antibióticos son un problema importante. Están aumentando cada año. Nosotros estamos intentando sacar compuestos y materiales que puedan protegernos de ellas. La Organización Mundial de la Salud ya ha avisado que para el 2050 puede que muera más gente de bacterias resistentes que incluso de cáncer. En 2021 más de 1,2 millones de personas de todo el mundo murieron como consecuencia directa de bacterias resistentes a los antibióticos.
–El refrán dice que es mejor prevenir que curar... ¿qué consejo lanzaría?
–El que existan bacterias resistentes se debe al excesivo uso de los antibióticos. Hay gente que se automedica antibióticos cuando la enfermedad es debido a un virus y a una bacteria. El hombre está haciendo un mal uso de los antibióticos pero no solo a nivel particular. También se está suministrando antibiótico a los animales de las granjas para que no enfermen... y el resultado es que cada vez somos más inmunes a sus efectos.
El virus de la covid no va a desaparecer. Si el de la gripe no ha desaparecido, este tampoco
–Y el virus de la covid, ¿está acabado o hay visos de ello?
–La pandemia está controlada porque ya hay mucha inmunidad en el mundo adquirida por las vacunas y las infecciones pero el virus no va a desaparecer. Si el de la gripe no ha desaparecido, este tampoco.
–¿Cuánto cuesta investigar en España?
–La investigación en España es muy complicada y precaria. No hay todo el apoyo que debería de haber. Es muy difícil conseguir proyectos y dan muy poca financiación a los que existen. Si no tienes financiación no puedes tener gente trabajando en ellos ni comprar material para los experimentos. Yo tengo la suerte de que cuento con la fundación de la Universidad Católica de Valencia que me ha apoyado desde el principio porque si fuera por la financiación estatal y autonómica sería imposible. Es una pena, pero así es. Seguimos peleando.