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La ministra de Igualdad, Irene Montero.EFE

Sociedad

La falta de ciencia de la ley trans le explota a Montero: el Colegio de Médicos pide exigir un informe sanitario

El CGCOM advierte de los riesgos de la autodeterminación de género sin las debidas garantías

Si hace unos días los pediatras españoles denunciaban la falta de debate en la redacción de la ley trans que prepara Igualdad, ahora ha sido el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) el que ha advertido del error que supondría la autodeterminación de género por parte de los menores sin las debidas garantías. Cada vez menos argumentos sustentan un texto que ha sido torpedeado incluso por el PSOE.

Según el CGCOM, los informes de equipos médicos multidisciplinares constituyen «una garantía» para los menores solicitantes de autodeterminación de género, algo que debería estar recogido en la ley.

«La asistencia a los menores por parte de equipos médicos multidisciplinares especializados durante todo el proceso de la autodeterminación de género disminuiría el riesgo de no persistencia en el deseo de transexualidad y los riegos psicológicos y orgánicos derivados de un proceso acelerado de la transición de género», añade el CGCOM.

El texto de Igualdad divide el procedimiento de cambio registral en tres tramos: los mayores de 16 años podrán cambiar de sexo por su cuenta y sin más requisitos que un periodo de reflexión de tres meses; los de 14 y 15 necesitarán un permiso paterno; mientras que los menores de entre 12 y 13 deberán aportar un informe judicial.

Esta ley, además, suprime la presentación de un informe médico o psicológico que acredite la disforia de género, antes llamada trastorno de identidad de género. Así, el Consejo General advierte que el planteamiento, al legitimar la autodeterminación sin más condiciones que la asistencia de sus representantes legales, «no resulta adecuado para proteger el mejor interés del menor comprendido en esa franja de edad que carezca del suficiente grado de madurez o cuya situación de transexualidad no esté estabilizada».

«Debe tenerse en cuenta que las intervenciones médicas dirigidas a la ejecución del proceso de transexualidad exigen una especial prudencia en menores, dada la irreversibilidad de muchas de las terapéuticas precisas para el proceso de transexualización», señala el CGCOM.

«Falta de debate social»

Hace apenas una semana, la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria manifestaba que el proyecto de ley trans «no valora en la medida que sería deseable» la participación de los padres y profesionales en el proceso de autodeterminación de género de los menores.

«Se echa en falta un debate social, necesario para conseguir una regulación más ajustada a las necesidades de las personas trans y un mayor consenso», añadían.

Críticas de los psiquiatras

También se han pronunciado en contra varios expertos de psiquiatría. En un artículo en el diario El Mundo, reprochaban al Ministerio de Igualdad la falta de consenso científico a la hora de redactar esta ley, así como los riesgos de convertir los deseos en derechos sin el debido debate social.