Sociedad
Muere por la mordedura de un gato cuatro años después
Una bacteria se extendió por todo el cuerpo y los médicos no pudieron hacer nada
Un hombre que recibió un mordisco de un gato en el dedo ha fallecido cuatro años después del suceso por culpa de una infección causada por una bacteria que le trasmitió el felino.
Henrik Kriegbaum Plettner, un danés de 33 años, adoptó en 2018 una gata y sus gatitos procedentes de un refugio. Al intentar mover a uno de los recién nacidos, este le mordió en el dedo. Pese a que no le dio demasiada importancia, su mano comenzó a hincharse a las pocas horas hasta alcanzar el doble de su tamaño.
Finalmente acabó acudiendo al hospital donde fue internado durante un mes, durante el cual se sometió a quince operaciones. Sin embargo, cuatro meses después de la última intervención, el dedo seguía sin funcionar correctamente y los médicos decidieron amputarlo.
Tras la amputación, la salud comenzó a empeorar. «Tenía el sistema inmunológico debilitado, neumonía, gota y diabetes», explicó su madre a los medios locales. «El gato había mordido justo en un vaso sanguíneo, y cuando un gato muerde y saca el diente, el agujero se cierra y la bacteria se propaga», añadió.
Las infecciones por mordedura de gato suelen estar causadas por una bacteria patógena conocida como Pasteurella multocida. En algunas ocasiones, puede ocasionar una rara infección conocida como fascitis necrosante.
Al cerrarse la herida casi inmediatamente después de la mordedura, la bacteria entró en su torrente sanguíneo a través de la vena y comenzó a extenderse por todo el cuerpo. Plettner falleció en octubre, pero la familia lo ha hecho público ahora para advertir de los riesgos de estas mordeduras. «No teníamos ni idea de que estaba gravemente enfermo. Después de una mordedura así solo piensas que es un gato. No te arriesgues», señaló la viuda del joven.