La número dos de Montero se ríe de las excarcelaciones de violadores: «¡Van a salir miles!»

Pese a que las fisuras de la ley del 'solo sí es sí' han dejado ya un reguero de 139 condenados por delitos sexuales con las penas atenuadas y más de una decena de excarcelados, la secretaria de Estado de Igualdad, Angela Rodríguez Pam, se toma a risa una calamidad a la que ella insiste en quitar hierro.

En una reciente mesa redonda sobre feminismo organizada por Podemos, la número dos de Irene Montero no mostró arrestos al restar importancia a la docena de puestas en libertad, al tiempo que se quejaba de que las consecuencias adversas de su propia ley «es lo que nos echa en cara ahora mismo la extrema derecha». «De los creadores de las personas van a ir al registro para cambiarse de sexo todas las mañanas, llega ¡los violadores a la calle! ¡Miles, oleadas!», dice entre risas, provocando también la carcajada del resto de participantes.

Una de ellas, María Naredo –asesora de la ministra Montero–, califica poco después de «bulo en toda regla» las informaciones sobre las excarcelaciones provocadas por la ley del ‘solo sí es sí’. «¿No querrás decir que los jueces pueden interpretar el Código Penal, no? ¿No querrás decir que pueda haber algún operador jurídico que sea un poquito machista, no?», interrumpe, irónica, Rodríguez.

Al hilo de esto, Rodríguez vuelve a eludir todo atisbo de autocrítica para, en su lugar, poner el foco sobre sus adversarios políticos. «Se ha convertido a las feministas y nuestras luchas en el objetivo a batir. La violencia contra las mujeres, la misoginia, es el eje de la extrema derecha», declama. «La violencia machista no es una lacra, no es una enfermedad, no es casual, no es un volcán en La Palma, es estructural y tiene responsables, tiene agenda política llevada a cabo por personas y estructuras y diferentes actores institucionales y mediáticos que ejercen espacios de responsabilidad», añade.

Como no podía ser de otra forma, la secretaria de Estado también carga contra la judicatura, respecto a la que reitera, como es habitual entre las integrantes del ministerio, que «hay jueces y sentencias abierta y dolorosa y descaradamente machistas» y «algún operador jurídico al que le pueda faltar alguna información al respecto de la perspectiva de género…».