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Las excavadoras trabajan entre los escombrosEFE

Desastres naturales

Qué hacer y qué no ante un terremoto como el de Turquía

El pasado lunes, la frontera entre Turquía y Siria tembló en un terrible terremoto que ha devastado la zona

Las labores de rescate continúan en la zona sur de Turquía y Siria, donde un terremoto de magnitud 7,8 en la escala Richter hacía temblar el suelo y arrebataba la vida a más de 8.000 personas. Más de 6.000 edificios se han desplomado a causa del sismo solo en la parte de Turquía y miles de personas se encuentran todavía bajo los escombros.

Un terremoto, tal y como recoge la Real Academia Española, es «una sacudida violenta de la corteza y manto terrestres, ocasionada por fuerzas que actúan en el interior de la Tierra». Así, en este caso, el movimiento se produjo por el deslizamiento de la placa de Anatolia, una de las más activas de la zona del Mediterráneo, responsable del terremoto de 1939, que acabó con 30.000 víctimas mortales.

Los daños que produce un seísmo de este calibre dependen en gran medida de las construcciones y edificios de la zona, ya que deben ser lo suficientemente robustos para soportar las sacudidas. No obstante, desde la Cruz Roja nos cuenta cómo debemos prepararnos y cómo debemos actuar ante un terremoto como el de Turquía.

Antes del terremoto

En el caso de vivir en una zona de actividad sísmica elevada, es muy importante estar preparados para lo peor. Por ello, es importante seguir los siguientes consejos:

  • Tener a mano y en un sitio de fácil acceso un botiquín de primeros auxilios, linternas, radio, pilas y algunos alimentos no perecederos, así como agua embotellada.
  • Conocer los teléfonos de emergencia.
  • Supervisar y reforzar la estructura de la vivienda.
  • Asegurar firmemente aquellos objetos que puedan ocasionar daños al desprenderse.
  • Coloca los objetos de mayor peso y los objetos inestables en las partes bajas de las estanterías.
  • Tener cuidado con los objetos colgados o sujetos en la pared, como cuadros o espejos.
  • Prestar atención a los falsos techos, ya que pueden ser vulnerables a los movimientos sísmicos.

Durante el terremoto

En caso de terremoto, lo principal, aunque sea difícil, es mantener la calma. Recuerda que si el terremoto no es fuerte, no hay motivo de preocupación.

Los conejos de la Cruz Roja son los siguientes:

  • No salir del edificio si nos encontramos en un lugar seguro.
  • En el caso de estar en un interior, protégete aproximándote a zonas estructurales fuertes, como pilares. Trata de no colocarte cerca de muebles y objetos pesados, así como bajo mesas de cristal o los marcos de las puertas. Una mesa robusta puede ser un buen escudo.
  • No utilizar el ascensor, ya que podrías quedar atrapado.
  • Dirigirse a lugares abiertos en el caso de estar en el exterior, alejado de lugares de los que puedan caer objetos. Trata de no correr para no cundir el pánico.
  • En el caso de estar dentro del coche, es importante detener el vehículo en un lugar seguro y no salir.
  • Alejarse de puentes, postes eléctricos y zonas de desprendimiento.

Después del terremoto

Es el momento de evaluar los daños y actuar en consecuencia:

  • En el caso de que el terremoto no haya producido roturas de cristales, caídas de objetos o fisuras en las paredes, no tenemos que preocuparnos.
  • Si el terremoto sí ha causado la rotura de cristales, la aparición de fisuras o la caída de objetos colgantes, tenemos que prepararnos para abandonar el edificio y desplazarnos a un lugar seguro. Es recomendable cerrar las llaves de suministro. Utiliza siempre las escaleras