Los veterinarios, contra la ley animalista: «Somos los únicos titulados con capacidad para dictaminar»

Los ecos de la aprobación en el Congreso de los Diputados de la ley de bienestar animal siguen resonando en la esfera pública. La norma aún se encuentra en tramitación parlamentaria y ha de pasar por el Senado para su aprobación definitiva, momento en el que se pueden plantear enmiendas que perfilen el texto.

Es por eso que veterinarios, personas del entorno rural y juristas confían en que se realicen cambios en el final de su tramitación para corregir así algunos de esos errores: «Esperamos que estos posteriores trámites legislativos consigan mejorar esta normativa», explican desde el Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid.

Este órgano lamenta que en la propia exposición de la ley se indique que: «El objetivo no es tanto el garantizar el bienestar de los animales [...], sino el regular el reconocimiento y la protección de la dignidad de los mismos». Esto, según ellos, dificulta la evaluación de la norma, puesto que donde existe consenso científico es en el bienestar de los animales, no en los derechos o dignidad de los mismos.

Además, expresan las dudas existentes respecto a qué animales se aplica, además de perros, gatos y hurones. «Esperamos que se aclaren con el 'listado positivo' a los que finalmente afecte», explican. Y es que, a pesar de estar al borde de la aprobación definitiva, aún no se ha hecho pública esa famosa lista que, entre otras cosas, prohibirá la tenencia de algunos animales considerados exóticos.

Los veterinarios hacen especial hincapié en que cuenten con ellos a la hora de redactar este tipo de leyes, así como en su mejora: «Solicitábamos que en los distintos comités y grupos de trabajo se refuerce la presencia de los veterinarios, como únicos titulados con capacidad para dictaminar en salud y bienestar de los animales».

Una ley «confusa»

Desde la Organización Colegial Veterinaria (OCV) lamentan el resultado de la votación de la pasada semana y, en palabras de su presidente, Luis Alberto Calvo, «va a ocasionar más problemas de los que pretende solucionar y sale adelante con una preocupante falta de consenso social, político y científico».

«Nos preocupa tremendamente la indefensión en la que quedarán los veterinarios, únicos profesionales titulados con conocimientos específicos en bienestar animal, al haber eliminado su criterio técnico en la toma de decisiones en cuestiones tan importantes como la eutanasia, con una normativa que nos puede abocar a situaciones cercanas al maltrato animal», señala.

Desde la OCV recalcan que es necesaria una legislación sobre bienestar animal, pero siempre que se redacte «con criterios basados en la ciencia y contando con quienes tenemos a nuestro cargo la sanidad y el bienestar animal».