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Imagen de archivo de dos vehículos de los Mossos d'EsquadraEuropa Press

Detenidos cinco menores por agredir sexualmente a una compañera en un instituto de Rubí (Barcelona)

Los hechos ocurrieron dentro del aula. Había un profesor dentro que no se habría dado cuenta de lo que ocurría

Los Mossos d'Esquadra han detenido a cinco menores, de entre 14 y 17 años, por haber agredido presuntamente a una compañera de instituto en Rubí (Barcelona). La agresión tuvo lugar a principios de febrero, el día 2. Los chicos, aprovechando un cambio de asignatura, la abordaron dentro del aula, la tiraron al suelo y le acercaron los genitales a la cara para simular una felación. Cuando la joven intentó escapar uno de ellos la volvió a golpear y la tiró al suelo.

Así consta en la denuncia que presentó la madre de la chica, que tiene la misma edad de los presuntos agresores, según avanza El País. En ese momento había un profesor dentro del aula, y al parecer no se dio cuenta de lo que estaba ocurriendo, por eso no actuó. Algunos alumnos explican que no era la primera vez que este grupo de chicos actuaba de esta forma, ya lo habían hecho con otros estudiantes.

Los Mossos d'Esquadra detuvieron a los cinco menores el pasado siete de febrero, también en el instituto y pasaron a disposición de la Fiscalía de Menores, que ya ha aplicado las medidas cautelares pertinentes. La policía autonómica está haciendo acompañamiento a la víctima en todo el proceso de denuncia.

Sallent y La Ràpita

Este caso vuelve a poner en el disparadero a las escuelas catalanas, tras los casos de Sallent y de La Ràpita. En el primer caso, recordemos, dos niñas de 12 años se lanzaron del balcón de su casa. Una de ellas murió y la otra está ingresada en estado grave en el hospital Parc Taulí de Sabadell. Sufrían acoso escolar por su origen extranjero (eran argentinas) y porque una de ellas habría decidido cambiar de género. Esta semana la Generalitat ha tenido que pedir disculpas y reconocer que el sistema había fallado, al no detectar esta situación de bullying, aunque lo había negado en un primer momento.

Y en La Ràpita, un chico de quince años, Pol, con cierto grado de autismo, también se encuentra ingresado tras saltar desde el balcón de su domicilio. Había explicado a sus padres que un grupo de niños se burlaban de él y estaba solo en el instituto. Aunque los padres se reunieron con la tutora y le explicaron la situación, la denuncia no llegó al director del centro.