Medio ambiente
El curioso caso del lago Tulare de California que ha reaparecido tras 80 años seco
Mientras en España algunos embalses se vacían, en Estados Unidos ha resurgido este depósito natural de agua debido a las lluvias torrenciales
La sequía está marcando la actualidad en buena parte del planeta. Entre los países afectados se encuentra España, donde marzo fue el segundo mes más seco del siglo, según datos facilitados por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Y es que este tercer mes del año fue seco o muy seco en la mayor parte del territorio peninsular, salvo en Galicia, suroeste de Castilla y León y Extremadura, así como Canarias y Baleares. La agencia avisa, por tanto, de que persiste la sequía meteorológica.
Pero mientras en lugares como Cataluña algunos embalses están completamente vacíos, en otros lugares del mundo los lagos extintos reaparecen. Es lo que ha ocurrido en Estados Unidos, donde una masa de agua que se secó hace casi 80 años vuelve ahora a existir.
Este fenómeno se ha producido en California, donde las lluvias torrenciales de este húmedo invierno boreal han desbordado los embalses regionales.
Lo cierto es que este lago estaba considerado como la masa de agua dulce más grande al oeste del río Misisipi. Pero hace ocho décadas desapareció después de secarse por completo. Esto fue consecuencia del desarrollo de la agricultura en la región, motivo por el que el agua fue desviada hacia canales de irrigación reduciendo el lago, que se secó finalmente después de la Segunda Guerra Mundial y dio paso a tierras de cultivo.
Ahora, tras las lluvias y una vez que se derrita la nieve que cubre las montañas de la Sierra Nevada, los expertos prevén que el lago se recupere hasta unos niveles insospechados. A pesar de que en varias ocasiones desde su desaparición se ha inundado, siendo la más reciente en 1983 cuando cayó una nevada récord en las montañas, nunca había llegado a la magnitud actual.
Una transformación del paisaje
Las imágenes de satélite que mostramos al comienzo de este artículo son ya sorprendentes. La NASA las ha compartido para mostrar la evolución del lago entre marzo de 2022 y el mismo mes de 2023. Mientras que el año pasado era una llanura seca, en la imagen más reciente se puede observar una mancha azul en la parte central del Valle de San Joaquín que representa la dimensión de la masa de agua.
Aunque esto pueda parecer una buena noticia para el medio ambiente, supone un varapalo para los vecinos y la economía de la zona. Esas tierras llevaban años utilizándose para la actividad agrícola, algo que ahora, con la recuperación del agua de su territorio natural, será imposible de realizar.
Según explican desde el medio local KVPR, durante miles de años, el agua de la región sustentó a la tribu nativa americana Tachi Yokut, que vivían y pescaban en las orillas. Tal y como les relata el escritor Mark Arax, que acudió por primera vez a Tulare a finales de los 90, durante los siglos XIX y XX hicieron «todo lo posible para borrar ese lago. Pero ya sabes, el suelo recuerda, tiene memoria», sentencia.
Tanto agricultores como equipos de emergencia están tratando de evitar el aumento del nivel del agua. Sin embargo, luchar contra el cauce natural del lago supone una tarea complicada. Sean Norman, jefe de la sección de operaciones, insistió en la dificultad del proceso: «Tenemos que analizar que si evitamos que esta agua se mueva aquí, ¿adónde irá a parar?».