Las claves detrás del conflicto ganadero en Castilla y León
La tuberculosis bovina, importante enfermedad infecciosa, ha levantado una polvareda en la comunidad y ha enfrentado a la Junta y al Gobierno
El campo castellano y leonés se ha mostrado guerrero estos últimos días con motivo del control establecido por las autoridades a la tuberculosis bovina (Mycobacterium bovis). Las imágenes de centenares de personas intentando entrar por la fuerza en la sede de la Junta de Castilla y León en Salamanca representan el episodio más grave de un conflicto que se venía avivando en las últimas semanas entre ganaderos, veterinarios y políticos por las medidas de control de la tuberculosis bovina.
¿En qué consiste la enfermedad?
Según la Organización Mundial de Salud Animal, se trata de una enfermedad bacteriana crónica de los animales causada por el complejo de Mycobacterium tuberculosis. Es una importante enfermedad infecciosa del ganado bovino que también afecta a otros animales domesticados y a ciertas poblaciones de animales silvestres y que produce un estado general de enfermedad, neumonía, pérdida de peso y, a la larga, la muerte.
¿Cómo se trasmite?
La enfermedad es contagiosa y se transmite directamente por contacto con animales domésticos o silvestres infectados o, de forma indirecta, por ingestión de piensos contaminados. La vía de infección habitual en los rebaños bovinos es la inhalación de gotículas infectadas que un animal enfermo expulsa al toser. Los humanos, por su parte, pueden infectarse el ingerir lecha cruda de vacas infectadas o a través del contacto con tejidos infectados en mataderos o carnicerías.
¿Por qué hay polémica?
Al tratarse de una enfermedad muy contagiosa, la Comisión Europea ordena a los países un estricto seguimiento para que pueda ser erradicada, y esto consiste en restricciones de movimiento y sacrificios obligatorios. La Junta de Castilla y León decidió flexibilizar estos requisitos y esto disparó la alerta en otros territorios por el riesgo de contagio e incluso el Consejo de Colegios Veterinarios de Castilla y León pidió a la Junta que corrigiera «lo antes posible» la medida.
Por ello, el Gobierno central interpuso un recurso en el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, al considerar que se estaba poniendo en riesgo a las explotaciones ganaderas no infectadas. Finalmente, el tribunal acordó como medida cautelar suspender la resolución de la Junta y queda así sin efecto también la orden ministerial, lo que supone volver a la ruta habitual de acciones para erradicar la tuberculosis bovina.
«Prácticas contrarias a la sanidad animal»
El Gobierno cree que Vox «está inoculando» al PP «prácticas que son contrarias a la seguridad y a la sanidad animal» tras la polémica por la resolución de la Junta de Castilla y León que intentaba flexibilizar las medidas de control contra la tuberculosis bovina.
Así lo ha explicado el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, que ha calificado de «extremadamente grave» la situación generada en Castilla y León a cuenta de la tuberculosis bovina porque se ha intentado «crear un problema, saltándose las normas sanitarias de España y de la Unión Europea».
Además, ha defendido la actuación «inmediata» del Gobierno para parar la aplicación de la resolución de la Junta, que ha permitido «restablecer la legalidad en la protección del sector ganadero», y ha reclamado que no haya «más aventuras ni más juegos que vayan en perjuicio» de la ganadería.