Los campamentos de personas sin hogar y el consumo de fentanilo rodean a Silicon Valley
El fentanilo, la droga que mató a Prince, en aumento: «Se ve una tendencia preocupante»
España en el año 2022 ha sufrido un gran pico: ha pasado de un tres por ciento a un 14 % de prevalencia de consumo
Estados Unidos está inmersa en la pesadilla del fentanilo, una molécula que se utiliza como analgésico, más conocida como «la droga zombi». Esta sustancia, aunque pueda sonar desconocida, no lo es. Tampoco es nueva: muchos músicos y actores han muerto por consumir esta sustancia. Uno de ellos, Prince.
El fentanilo es del grupo farmacológico de los opioides, como también lo son la morfina y la oxicodona. Una de las particularidades que tiene esta peculiar droga es que su potencia es mucho mayor que el de la morfina. De hecho, se calcula que su intensidad es entre 50 veces más fuerte que la heroína y 100 veces más fuerte que la morfina. Es el líder de los opioides.
«En Estados Unidos el problema es estrepitoso», explica a este periódico Esther Gramage, profesora de toxicología de la Universidad CEU San Pablo y miembro del Instituto de Estudios de las Adicciones (IEA-CEU). Muchos son los vídeos que salen en las redes sociales mostrando la epidemia de este país, donde personas de todas las edades están tirados en la calle por culpa de esta droga.
Aunque Europa no llega a esos niveles «cada vez hay más casos», asegura la experta en materia. Esto ocurre porque ha aumentado «la prevalencia de consumo de estas sustancias», en concreto a nivel de adicción como droga, no como fármaco. Y es que, aclara la miembro del instituto, «hay que diferenciar el uso de esta molécula», puesto que una de las características de estos fármacos opioides es la dependencia.
En España la situación es similar a la del resto de Europa. Según el último informe emitido por el Plan Nacional sobre Drogas de España, el año 2022 ha sufrido un gran aumento, ha pasado de un tres por ciento a un 14 % de prevalencia de consumo de fentanilo. «Es con diferencia la droga que más ha crecido», apunta la profesora del CEU. Aun así, asegura, seguimos lejos del problema que tienen en Estados Unidos.
Hay que seguir las recomendaciones
El fentanilo es un medicamento recomendado y recetado por médicos a pacientes con dolores intensos, crónico y que presentan tolerancia física a otros opioides. Por ello, es muy importante, aclara, usarlo exactamente como se indica y no ingerir una dosis mayor. «Si se toma el fármaco de forma justificada y recetado por un médico no hay problema», calma la profesora.
Sin embargo, para tratar de frenar esta epidemia, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) ha emitido una alerta para hacer frente a «la crisis de opioides del país», pero no es suficiente, ya que los problemas que hay con el consumo de estas sustancias existen por culpa de mercados ilegales», denuncia Gramage.
Además, para que el efecto sea mayor, muchos de estos distribuidores ileales mezclan esta «droga zombi» con otro tipo de sustancias adictivas, como pueden ser la heroína, metanfetaminas y cocaína, entre mucha otras.
Qué famosos quedaron atrapados
No se sabe si esta droga es la más mortal de todas, pero sí ha matado a muchas personas, entre ellas personajes como Prince. El cantante de Purple Rain murió en junio de 2016. Al realizarle la autopsia encontraron grandes cantidades de fentanilo en el cuerpo.
Otra de las víctimas que cayó en las garras de esta potente droga fue Bobby Brown Jr. El hijo del cantante Bobby Brown, murió de una sobredosis. Los informes toxicológicos demostraron que tenía en el sistema alcohol, fentanilo y cocaína. El rapero Mac Miller murió con 26 años por la misma causa. Sin embargo, según explicaron, habría muerto «accidentalmente», ya que él se había comprado pastillas de oxicodona y misteriosamente contenían esta fatal droga.
«Yo no me atrevo a decir que el fentanilo sea más mortal que otras drogas», asegura la toxicóloga, pero es verdad que «en sobredosis puede llegar a serlo» porque tiene una potencia muy alta.
Esta epidemia no va a aparecer y mucho menos si se sigue administrando de forma ilegal. A pesar de esto, la miembro del instituto y profesora del CEU llama a la calma y pide que se sigan siempre las recomendaciones de los médicos.