Catorce bomberos españoles ponen rumbo a Marruecos para encontrar vida bajo los escombros

Catorce bomberos españoles miembros de la ONG Bomberos Sin Fronteras viajarán esta tarde a Marruecos, donde llegarán la próxima madrugada, para trabajar en las labores de búsqueda de supervivientes tras el terremoto de magnitud 7 que ha arrasado varias zonas del país.

Los bomberos provienen de distintos puntos de España, Huelva, Madrid, Córdoba y Murcia, que como afirma el portavoz de los bomberos, Antonio Nogales, trabajarán con la premisa de «intentar ser lo más polivalente posible y no generar ningún problema para las autoridades» de manera que, una vez en suelo marroquí acudirán a la zona que les indiquen.

Para realizar su trabajo cuentan con sus perros especializados en busca de personas sepultadas con vida. Estos perros saben diferenciar el estado de las personas, si están con vida «se ponen a ladrar», en el caso de que descubran a una persona fallecida, «dan vueltas en círculos alrededor de donde está el cadáver». Desde Huelva ha salido un perro llamado Otto, un debutante que hizo su primer trabajo en el terremoto de Turquía el pasado febrero.

Los bomberos se han despedido de sus hijos antes de partir. «Nos desplazamos con muchísima ilusión y con muchísimas ganas de llegar cuanto antes y empezar a trabajar», explica Antonio Nogales, que, como sus compañeros, se prepara para dormir lo que pueda en el viaje, porque una vez allí puede que no duerman durante dos o tres días, ya que las primeras jornadas son clave para encontrar supervivientes.

«La esperanza no la perdemos, y estoy seguro de que en los próximos días van a seguir apareciendo muchas personas vivas que ahora mismo tienen que estar sepultadas», ha concluido.