Mujer embarazada mirando la ecografía de su bebé
Los abortos en Portugal aumentaron un 15 % en 2022 hasta alcanzar los 16.471
La mayor parte de los infanticidios se produjeron a petición de la mujer embarazada en las primeras 10 semanas de gestación
Los abortos en Portugal no dejan de crecer. La ley 16/2007, de 17 de abril, estableció que la madre puede acabar con la vida del aún no nacido a las 10 semanas de vida (tercer mes). Según el último informe, divulgado por la Dirección General de Salud (DGS) del país luso, en 2022 se alcanzaron los 16.471 infanticidios, un 15 % más que el año anterior.
Este aumento significativo parece no importarle a la DGS, que aclaró que estos datos «van en línea con la tendencia verificada en otros países de la Unión Europea». En este sentido, el documento presentado refleja que en más del 20 % de los casos se superaron los cinco días que marca la ley lusa como máximo entre la petición de la primera cita y la consulta solicitada.
Sobre los motivos de los abortos, precisan que, al igual que en los años anteriores, estas prácticas –en su mayoría– se produjeron a petición de la mujer embarazada en las primeras 10 semanas de gestación, cifra que representó cerca del 96,4 % del total (casi 16.000).
La segunda razón más frecuente fue por «enfermedad grave o malformación congénita del feto» (el 3,3 % del total), mientras que la tercera más común fue para «evitar el peligro de muerte o lesión grave y duradera para la salud física o psíquica de la embarazada» (0,2 %). Además, según el documento, el año pasado se realizaron ocho abortos por «embarazos resultantes de crimen contra la libertad y autodeterminación sexual».
También aumentó la incidencia de abortos por cada mil bebés. Nuestro país vecino pasó de 180,3 en 2021 a 196,9 en 2022, añade el informe, que destaca que, si se compara con la media europea de 2019, «la última disponible», Portugal continúa por debajo de los niveles comunitarios.
El tiempo de espera medio entre la consulta para abortar y realizar esta polémica acción fue de 6,4 días y la edad media de gestación se mantuvo en siete semanas –dos meses–. Sin embargo, el informe aclara que el 15 % de casos fue atendido entre los 6 y 10 días después de la petición de cita, mientras que el 5 % aguardó entre 11 y 15 días.
En centros de salud púlicos
Según detalla el documento, la mayoría de los infanticidios (68,6 %) se ejecutaron en centros públicos. Además, el método más habitual fue el de la ingesta de medicamentos (98,9 %). En los privados, el 95,3 % de las intervenciones fueron quirúrgicas.
Igual que sucede en el resto de características, las sociodemográficas tampoco han variado significativamente, continúa el informe, que refleja que el grupo etario que más abortos realizó en números absolutos fue el de los 20-24 años.
La situación dio un giro de 180 grados cuando se preguntó por las mujeres extranjeras que abortaron por elección propia. Este grupo «creció ligeramente» en «consonancia con el aumento de mujeres extranjeras residiendo en Portugal». En 2022 registró un aumento del 28,9 %, tras los aumentos del 25,9 % y del 24,6 % de 2021 y 2020, respectivamente.
Menor porcentaje que en España
A pesar de las altas cifras de abortos, Portugal se encuentra en mejor situación que España. Mientras que en el país vecino aborta un 0,15 por ciento de la población, en nuestro territorio la suma asciende al 0,2 por ciento. Una diferencia al alza que atiende a las políticas proabortistas promovidas por el Gobierno de España desde la llegada al poder de Pedro Sánchez y, en concreto, desde que Irene Montero es ministra de Igualdad.