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Pollos blancos en una granjaFreepik

La gripe aviar se desplaza de Asia a Europa y África

Un estudio demuestra que dos nuevos virus H5 surgieron en 2020 en aves de corral africanas y en 2022 en aves silvestres europeas

La gripe aviar, que ya causó numerosos problemas el año pasado, vuelve con fuerza este invierno. El epicentro de los brotes mortales se está desplazando desde Asia a Europa y África, según revela un estudio publicado en la revista Nature.

A pesar de que este tipo de virus surgieron tradicionalmente en Asia, las investigaciones muestran que, si bien los brotes en 2016 y 2017 comenzaron en China, surgieron dos nuevos virus H5 en 2020 en aves de corral africanas y en 2022 en aves silvestres europeas.

«Estos resultados resaltan un cambio en el epicentro H5 de la HPAI (influenza aviar altamente patógena) más allá de Asia», escriben los investigadores en el artículo. El último brote de esta enfermedad afectó fuertemente a Europa y ahora ha llegado ya a todos los continentes excepto Oceanía y la Antártida.

La mayoría de casos ha afectado a aves domésticas y silvestres, pero también a humanos. Desde 2003, el H5N1 se ha encontrado en 873 personas, provocando 458 muertes, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). La mayoría de los casos estuvieron relacionados con la manipulación de aves de corral infectadas y no se sabe si se puede transmitir de persona a persona, según recoge The Guardian.

Hablamos de una afección altamente infecciosa. Los científicos estiman que un ave puede infectar hasta 100 más, y el virus está presente en las heces, la mucosidad, la sangre y la saliva. Las autoridades del gobierno del Reino Unido dicen que más del 99 % de los casos en aves de corral en ese país provienen de aves silvestres.

Aunque el sacrificio masivo solía ser la solución adoptada para evitar su contagio masivo, ahora deja de ser útil debido a que se encuentra ya ampliamente extendida. La propagación dentro de la industria avícola está determinada por la actividad humana y la forma en que se comercializan las aves, mientras que en el caso de las aves silvestres, las rutas migratorias son indicadores clave de dónde se propagará la enfermedad.