Coronavirus
El exministro de Sanidad admite que Reino Unido tuvo que haberse confinado 3 semanas antes
Ha argumentado que fue Dominic Cummings, el principal asesor de Johnson en esa época, quien instauró «una cultura tóxica» en Downing Street
El que fuera ministro de Sanidad en Reino Unido durante la pandemia del coronavirus, Matt Hancock, ha admitido este jueves que pudo y debió confinar a su país tres semanas antes de cuando lo hizo, el 23 de marzo de 2020.
Hancock, que dimitió en junio de 2021 tras revelarse que se había besado con una amante en su oficina en contra de las restricciones, ha declarado en la mañana de este jueves ante la investigación oficial que examina la gestión de las autoridades durante la crisis sanitaria.
Durante su intervención, el antiguo ministro ha señalado que, «con retrospectiva», después de ver cómo Italia se había confinado el 28 de febrero de 2020 y teniendo en cuenta las predicciones de los científicos, es el momento en que se debería haber actuado. Habiendo reflexionado mucho sobre esto durante los últimos años, ha reconocido, el primer momento en el que realmente «pudimos haber hecho algo fue el 2 de marzo», tres semanas antes de lo que lo hicieron, ha manifestado.
Hancock, que actualmente suele aparecer en programas de telerrealidad, asegura que planteó al entonces primer ministro, Boris Johnson, la idea del confinamiento en una conversación telefónica el 13 de marzo. Sin embargo, tal y como ha reconocido «no hay registros sobre ello».
El político de 45 años, que ha dicho que dejará su escaño al final de esta legislatura, ha rechazado asimismo las acusaciones de previos testigos en esta pesquisa, que han declarado que «mentía» constantemente, al afirmar que «no hay pruebas» de que eso fuera así.
Por contra, ha argumentado en su defensa que fue Dominic Cummings, el principal asesor de Johnson en esa época, quien instauró «una cultura tóxica» en Downing Street, donde se ninguneaba al personal, se excluía a los ministros de la toma de decisiones y siempre se buscaban culpables.
En su opinión, Cummings intentaba «usurpar el poder» de Johnson, quien le fichó tras haber colaborado con él en la campaña del Brexit en 2016.
En los próximos días, será el propio Boris Johnson comparecerá ante la exjueza Heather Hallett, que preside la investigación. También se espera que lo haga el actual jefe del Gobierno, Rishi Sunak, que fue ministro de Economía durante la pandemia.