El baile y la música, un gran tratamiento para enfermos mentales: «El arte es un conducto entre unos y otros»
AISS es una asociación no lucrativa que pone a su disposición pisos tutelados para personas con enfermedad mental
La música y el baile curan el alma y la Asociación de Iniciativas Sociales (AISS) lo sabe, por eso cuentan con el arte para ayudar a los enfermos mentales. Estas actividades para los pacientes son grandes métodos de autoconocimiento personal porque, sólo con un movimiento o con una nota, son capaces de encontrar sentimientos y emociones que creían haber perdido. Y es por eso que, para celebrar la Navidad y demostrar al mundo cómo funcionan en la asociación, El Debate ha podido pasar una mañana con ellos y descubrir en profundidad cómo es este trabajo.
AISS, que se fundó en 1999, es una asociación no lucrativa que pone a su disposición pisos tutelados para personas con enfermedad mental. Junto a esta prestación también ofrecen en la asociación un servicio de ayuda a domicilio.
Jorge Vidal de la Fuente, médico psiquiatra, ha explicado que la música es un elemento que, para los pacientes que tienen problemas de salud mental graves, «puede facilitar mucho su integración con otras personas». Es decir, es un vehículo para expresar las emociones.
En este sentido, hay estudios que asocian la capacidad para tocar el piano con una mejoría de las habilidades cognitivas, mejores capacidades de organización y de planificación del comportamiento, entre otras. Y es que, como ha afianzado Vidal de la Fuente, trabajan mucho la paciencia, la tolerancia y la frustración, elementos muy positivos para su día a día.
Ana Villota, directora y fundadora de AISS, ha explicado que después de 30 años trabajando para el colectivo de personas con enfermedades mentales, ha visto que el arte es una de las «grandes herramientas» que poseemos todos los ciudadanos para llegar a las los puntos más profundos de nuestro ser.
Más allá del arte y la música
Una mejoría es imposible si no se cuenta con grandes profesionales. Uno de ellos es el prestigioso bailaor flamenco Cristian Almodóvar, quien ha asegurado que el flamenco como música universal «llega donde a veces es muy difícil que lleguen palabras». Es tan importante en la salud mental, ha recalcado, porque fortalece la memoria y su agilidad y hace que el alumno que lo recibe esté «continuamente trabajando en su memoria».
Al hilo, el bailaor, junto a su equipo, han asegurado que cuando ve a los pacientes seguir sus pasos, sonreír y bailar «se harta de llorar», ya que ellos mismos «se acercan a los instrumentos» nada más comenzar los acordes. Esta sensación es «una de las más bonitas» que pueden existir.
Por otra parte, los músicos José Gabriel Numes, violinista, y Jonathan 'El Barouki', guitarrista, que han elegido el tango para esta demostración, han explicado que la elección de este «potente género» se ha debido a que «tiene pasión» y llevándolo al plano mental, evoca recuerdos, sentimientos. Además, una sola pieza puede hacer sentir «tanto tristeza como alegría».