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Miles de jóvenes en la playa de la Barceloneta de BarcelonaEFE

Sin estudios y sin trabajo, una realidad que se triplica entre la población joven extranjera de Barcelona

El 22,3 % de los inmigrantes que residen en la ciudad condal se encuentra en paro y sin estudios postobligatorios, 15 puntos más que la población española

Con el paso de los años, Barcelona se ha ido convirtiendo en una urbe donde van desapareciendo los oportunidades... Para ser más exactos, la ciudad condal tiene un severo problema con la situación laboral de la población joven comprendida entre los 16 y 24 años.

Así lo detalla el último informe presentado por la Fundación BCN FP y el Consejo Económico y Social de Barcelona (CESB), que recoge el día a día por el que atraviesan cerca de 15.000 jóvenes de la ciudad, desempleados y sin estudios postobligatorios.

De los miles de jóvenes que se encuentran en esta situación, muchos de ellos se encuentran en situación de alta vulnerabilidad social, creciendo esta realidad entre la población inmigrante que reside en la capital catalana. Estas son algunas de las conclusiones que se pueden sacar de este último informe de ambas entidades, que recoge en este estudio datos del censo de 2021 de Barcelona.

Para hacernos una idea de la importancia que representan estos 14.877 menores de 24 años, hay que destacar que este colectivo representa más del 10 % del total de habitantes de esta edad que hay en la ciudad condal –unos 140.000– y que únicamente cuentan con la ESO en un mundo cada vez más profesionalizado y exigente.

«Se trata de 14.877 menores de 24 años que como máximo tienen la ESO. Casi un 11 % es una cifra significativa para acometer políticas públicas específicas como hacen en otros países», explica Ángel Tarriño, coordinador del Observatorio de la Fundación BCN FP.

El dato, disparado entre los extranjeros

El perfil del joven desempleado y sin estudios en Barcelona no deja lugar a dudas: hombre y extranjero. El 22,3 % de los inmigrantes de entre 16 y 24 años se encuentran actualmente desocupados y no poseen estudios postobligatorios, un dato realmente impactante si tenemos en cuenta que este dato cae hasta el 7,1 % en cuanto a los jóvenes españoles en esa misma tesitura. Es decir, 15 puntos menos.

Del total de inmigrantes en esta situación de «vulnerabilidad, la nacionalidad americana representa el 18,5 %, la asiática el 16 %, la africana el 7,8 % y, finalmente, el resto de nacionalidades europeas son el 7,6 % según los datos generados por este informe.

Solo el 30 % está apuntado al paro

A pesar de estos datos realmente preocupantes, la gran realidad que revela el estudio son los vagos intentos de esta franja de edad por buscar un empleo. De hecho, a pesar de que 7 de cada 10 jóvenes en esta situación afirman querer buscar un trabajo, a la hora de la verdad esta cifra cae, ya que solamente el 30 % de la población joven desempleada y sin estudios se encuentra apuntada al paro –unos 4.500 aproximadamente–.

El dato restante pertenece a jóvenes que afirman no poder buscarlo por motivos familiares o de salud, entre otras causas.

En cuanto a la localización geográfica, el estudio señala principalmente dos distritos: Nou Barris y Ciutat Vella, en el que 2 de cada 10 jóvenes –23 % cada uno– protagonizan esta realidad. Les sigue Sant Martí y Sants-Montjuïc (20 % cada uno), Horta-Guinardó (13 %), Sarrià-Sant Gervasi (11 %), Gràcia (7 %) y finalmente Les Corts (5 %). Unos datos que disminuyen en aquellas zonas donde la renta familiar media es más elevada y que demuestra el mayor grado de vulnerabilidad que hay en los barrios con números mucho más elevados.

¿Es posible la inclusión laboral?

El informe termina estableciendo una serie de iniciativas y propuestas para incentivar la inserción sociolaboral de la población joven desempleada y sin estudios postobligatorios.

En concreto, son varios los apartados que el estudio concluye como claves:

En primer lugar, la estructura de la intervención, que entre otras soluciones recomiendan a las empresas del tercer sector llevar a cabo acciones que faciliten la integración educativa, social y laboral de la población joven más vulnerable. En cuanto al estudio de aquellos factores de vulnerabilidad, las iniciativas propuestas del estudio van desde la concesión de becas hasta garantizar la estabilidad de los jóvenes en cuestión de vivienda.

En tercer lugar, la definición de la trayectoria formativa y laboral, atiende cuestiones como los distintos itinerarios personales de experiencia profesional. En concreto, a aquellos jóvenes que proviene de centros de acogida, el estudio propone una cobertura básica para hacer frente sus necesidades básicas. De igual manera, el estudio recomienda promover las colaboraciones entre los centros formativos y las empresas.

Finalmente, el estudio resalta la importancia de la figura del aprendiz según las distintas fuentes consultadas por el estudio, con el objetivo de ayudar a los jóvenes para que adquieran el conocimiento adecuado a la hora de aprender una determinada actividad económica.