Mónica García saca a consulta pública el Real Decreto para fijar el empaquetado genérico del tabaco
Esta medida ya se está aplicando actualmente en muchos países como Australia, Francia, Noruega y Dinamarca
La ministra de Sanidad, Mónica García, ha anunciado que este mismo lunes se sacará a consulta pública la reforma del Real Decreto por el que se fijará el empaquetado genérico del tabaco, una medida incluida en el Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo, aprobado junto con las comunidades autónomas este pasado viernes.
«Se trata de una medida que ya se está aplicando actualmente en muchos países como Australia, Francia, Noruega y Dinamarca y que está dando unos efectos evidentes», ha afirmado la ministra, durante su intervención en los Desayunos Socio-sanitarios de Europa Press.
García ha asegurado que la evidencia científica demuestra que el empaquetado genérico es una medida «efectiva y que ayuda a que el propio empaquetado no funcione como un reclamo publicitario en sí mismo, haciéndolo menos atractivo y contribuyendo también a tomar la decisión de dejar de fumar».
En este sentido, ha reiterado que el Plan Antitabaco «parte de una premisa científica» y ha asegurado que los «lobbies con intereses comerciales se encontrarán con un muro si intentan influir en todo lo que tiene que ver con priorizar la protección de la salud de los ciudadanos».
«El barco de la lucha contra el tabaquismo ya ha zarpado y no vamos a dar ni un solo paso atrás en este compromiso», ha apostillado García.
También ha recordado que el Ministerio de Sanidad, «con la misma voluntad de acuerdo y diálogo que tiene desde el primer día», incluyó en su Plan el 90 % de las enmiendas y de las iniciativas de las autonomías.
García también ha insistido en que planes anteriores en esta materia han evitado «alrededor de unas mil muertes al año» por enfermedades relacionadas con el tabaquismo. «Esto significa que la misión lo más importante de este plan es dar más años de vida y más vida a los años» porque «es un Plan para evitar que la gente empiece a fumar y que la gente que quiere dejar de fumar pueda hacerlo», ha abundado.
«Lo hemos hecho con ambición, con trabajo. Lo hemos hecho sin miedo, con mucha coherencia, de la mano siempre, siempre, siempre, de la evidencia científica y con el orgullo de seguir siendo un país que es referencia y vanguardia en la defensa de la salud pública», ha señalado.
Entre otras medidas, este plan va a suponer la equiparación de la regulación de los productos relacionados con el tabaco, como los cigarrillos electrónicos, a la del trabajo tradicional. También la modificación de la fiscalidad del tabaco de la mano del Ministerio de Hacienda para que España se acerque a los países de su entorno y con el objetivo de que ese incremento fiscal pueda revertir en políticas de salud.
Además, el Plan también persigue aumentar los espacios libres de humo «para proteger el derecho a respirar aire limpio». «Cuanto más espacio libre de humo, más espacio libre de enfermedades asociadas al tabaquismo», ha destacado.
El fin también es impulsar la investigación sobre el tabaquismo y sus efectos, «reforzando la evidencia sobre el efecto de los nuevos dispositivos de liberación de nicotina». Ante las «voces catastrofistas» que rechacen el Plan y que ya se escucharon «en el año 2005 y 2010, con augurios apocalípticos».
Así, ha recalcado que, en los últimos años, las iniciativas en este sentido «se habían quedado pequeñas». «Por eso queremos que este vuelva a ser uno de los grandes desafíos del siglo XXI», ha dicho, criticando las «voces catastrofistas» que ya se escucharon en el año 2005 y 2010.