La ministra de Igualdad reta al PP y le exige que denuncie los casos de fraude de la ley trans

Los fraudes de la ley trans están a la orden del día. Francisco, una militar sevillana, y José María, una mujer que maltrató presuntamente a su expareja, son ejemplo de ello. Ana Redondo sigue los pasos de Irene Montero en lo que a esta norma se refiere y cree que «ningún hombre» en nuestro país busca beneficiarse de ella. Por ello, lejos de reconocer la realidad, la ministra de Igualdad ha retado y exigido este martes al PP que denuncie ante las autoridades competentes los supuestos casos de fraude que ha causado «inseguridad jurídica» a algunas víctimas de violencia por los intentos de sus agresores de cambiarse de género.

En este sentido, comenta Europa Press, Ana Redondo ha recriminado a la senadora del PP Nídia María Arévalo, quien en la sesión plenaria del Senado ha asegurado que seis supuestos agresores sexuales han solicitaron el cambio de género en la Comunidad de Madrid para acudir al mismo centro de atención de sus víctimas, que si tiene esas pruebas, debe denunciarlas «a las autoridades competentes». «Seguramente todos saldremos beneficiados porque se investigarán esos casos», ha aseverado la titular de la cartera de Igualdad.

Asimismo, la ministra, que ha mostrado todo su apoyo a la controvertida norma de Montero, ha preguntado a Arévalo: «¿De verdad cree que por el hecho de que alguien haga trampas la ley ya no sirve?». Además, ha recalcado que ha mejorado «la vida de más de 5.000 personas y ha hecho que se sientan más felices y acorde con lo que son».

Al hilo, Redondo ha afeado a la senadora popular la utilización de estos casos, con los que, según Redondo, Arévalo «no pretende que se sepa la verdad», sino «hacer ruido» y «entorpecer cualquier avance que se produzca en derechos de las personas del colectivo trans y LGTBI».

A pesar de las palabras de la titular, la Comunidad de Madrid ya avisó el pasado mes de marzo de la identificación de estos casos en el sistema VioGen. Todos ellos habían solicitado un cambio registral de su sexo para beneficiarse de las condiciones que ha dado la ley.

Además, han comentado que tres de estos hombres, a los que se les había denunciado en el pasado, han intentado acceder a puntos municipales del Observatorio de Violencia de Género en los que se encuentran sus víctimas.

Aunque la ministra busque defender la norma, esta ley, según especifica, castigará con la agravante de género todas las agresiones machistas cometidas en el pasado por hombres que soliciten su cambio de sexo registral.