Condenan a dos años de cárcel a una mujer enferma de 75 años por defender la vida frente a una clínica abortiva
Los manifestantes no armaron ninguna protesta agresiva ni se pelearon con ninguna de las madres que acudieron a matar a sus fetos o a pedir información
Una mujer se enfrenta a 11 años de cárcel por defender la vida de los no nacidos
Primero fue Lauren Handy, luego seis personas cuyos nombres no trascendieron y ahora una mujer de 75 años enferma. Si algo tienen en común estos ciudadanos estadounidenses es que han sido condenados por denunciar los terribles infanticidios que se llevan a cabo en las clínicas abortivas y defender así la vida de los no nacidos. A pesar de sus intentos, y aunque fue como señal de protesta, los agentes de policía les detuvieron por violar la Ley federal de Libertad de Acceso a las Entradas a las Clínicas (FACE).
La última en recibir esta fatal noticia fue Harlow, una anciana de Kingston, Massachusetts, que fue penada a 24 meses de prisión en virtud de la Ley FACE, la cual prohíbe conductas violentas, amenazantes, dañinas y obstructivas destinadas a intimidar a las mujeres que quieren realizar estas controvertidas prácticas. A esto se le suma, según Catholic News Agency, la conspiración de derechos civiles, un estatuto que prohíbe la violación de los derechos de alguien que le garantizan la Constitución y la ley de Estados Unidos.
Tal y como relata el medio católico, que ha tenido acceso a los testimonios de la mujer, Colleen Kollar-Kotelly, jueza del Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito de Columbia, fue la encargada de decidir la pena de la mujer. Esta misma, que fue seleccionada para este cargo por el expresidente demócrata Bill Clinton, también castigó a otros ocho manifestantes. Todos ellos declarados culpables. Además de la sentencia de prisión, los acusados podrían enfrentarse a multas de hasta 350.000 dólares (322.600 euros).
Sin embargo, aunque todos recibieron una acusación similar, la mujer estadounidense pudo permanecer bajo arresto domiciliario en espera de sentencia debido a «sus graves problemas de salud», aseveró su abogado, Allen Orenberg, el pasado mes de noviembre. A pesar de la insistencia del medio, la letrada no quiso especificar de qué enfermedad se trataba.
Estaban rezando el Ave María
Según muestra el vídeo de un hombre que acudió a la concentración y que también fue condenado 34 meses de prisión, los manifestantes no armaron ninguna protesta agresiva ni se pelearon con ninguna de las madres que acudieron a matar a sus fetos o a pedir información. Lo único que hicieron fue sentarse en un pasillo frente a la entrada de la clínica, cantar y leer versos de la Biblia. Por otro lado, muchos de ellos fueron acusados de allanamiento de morada, ya que se negaron a abandonar el lugar donde se encontraban.
Al hilo, según un comunicado de prensa de la Sociedad Thomas More, el Departamento de Justicia (DOJ) emitió el pasado viernes un comunicado declarando culpables a todos los ciudadanos a favor de la vida por «bloquear el acceso a una clínica de abortos». Asimismo, apuntó que, tal y como se demostró en el junio, los acusados participaron «en una conspiración» para crear «un bloqueo en la clínica abortiva» e impedir que esta proporcionara y «los pacientes recibieran los servicios».