Investigan al autor de un cuadernillo que muestra dibujos pornográficos y ofensivos con un diseño infantil
Abogados Cristianos lo tacha de «aberración» y pide su retirada total
El Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 2 de Cuart de Poblet (Valencia) ha iniciado una investigación contra Julio Serrano, autor del cuadernillo El niño Jesús no odia a los mariquitas y los responsables de la editorial valenciana responsable de la publicación, Fandogamia, por posibles delitos de exhibicionismo y provocación sexual.
El libro fue presentado a principios de mayo en el salón del cómic de Barcelona y unas semanas después la fundación Abogados Cristianos interpuso una querella por su contenido. Su autor, más conocido como Don Julio, es también historietista de la revista El Jueves.
La querella denunciaba que el libro para colorear está recomendado para mayores de seis años, tal y como aparecía en algunas plataformas de compraventa como Amazon, Fnac, Casa del Libro o El Corte Inglés, pese a que contiene escenas de sexo explícito, como un bebé teniendo sexo anal, dos monjas desnudas masturbándose, un hombre practicando una felación a otro, o un religioso con una biblia en la mano quemando a dos mujeres en la hoguera, entre otras ilustraciones de índole similar.
Por su parte, los responsables de la editorial aseguraron que la recomendación para mayores de seis años era un «error» de Amazon, y que en realidad estaba dirigido a un público adulto. No obstante, en la contraportada se muestra una advertencia de «prohibido de cero a tres años», de forma que, atendiendo a esto, el producto sería ‘apto’ a partir de esa edad. La juez ha solicitado a Fandogamia Editorial que «explique si se indicó que el libro no era para edad infantil, aportando justificación acreditativa de cuanto se indique». La plataforma, por su parte, ya ha cambiado la descripción del artículo.
Tras la polémica, Pedro F. Medina, editor de Fandogamia, calificó el volumen como un «librito de humor». «No hace falta colorearlo, te puedes reír con los chistes. Otra cosa es que no te hagan gracia, pero ese es otro tema».
«Con lenguaje sencillo y estética infantil el cuaderno ataca en repetidas ocasiones al cristianismo y otras confesiones religiosas, mientras anima a los usuarios a divertirse con los juegos de su interior», denuncia por su parte Abogados Cristianos, que lleva luchando por su retirada definitiva desde que se supo de su existencia. «La comercialización de un cuaderno de actividades 'familiar' que criminaliza a los cristianos, humilla sus creencias e incita a la sodomía y la masturbación, nos parece una aberración (mucho, pero que mucho más, cuando hay sexo con lo que parece un menor de por medio). Esta mezcla de estética infantil con temática sexual es una perversión en sí misma y debe frenarse de inmediato», exige.