Sanidad valora la posibilidad de prohibir fumar en el coche
El Consejo General de Enfermería así lo ha pedido en la consulta pública previa del anteproyecto de reforma de la ley del tabaco que prepara el departamento de Mónica García
El Consejo General de Enfermería (CGE) ha presentado sus alegaciones en el anteproyecto que reforma la ley del tabaco de 2005 en las que solicita que se incluya en el texto, en la ampliación de espacios sin humo que propugna el Ministerio de Sanidad, la prohibición de fumar en los coches particulares, especialmente en el caso de que viajen menores en ellos.
La propuesta ha sido bien recibida por el departamento que dirige Mónica García, aunque deberá consultarlo con otros organismos institucionales para determinar si es legal y jurídicamente viable, según informa El Español.
«Esta reforma legislativa es imprescindible ante los cambios que se han producido en los últimos tiempos, tanto a nivel social y epidemiológico, como en los patrones de consumo, con especial atención a la protección infantil, afectada a una exposición no deseada en muchas áreas y ambientes de manera innecesaria e injustificada», aseguran desde el CGE ante el fin del trámite de consulta pública previa del anteproyecto el próximo 15 de agosto.
Así, consideran que se debe proteger a la población, especialmente joven, frente a las nuevas formas de consumo, por lo que «deben ampliarse los espacios libres de humo, y resolver las carencias en la regulación de los cigarrillos electrónicos sin nicotina y de los productos a base de hierbas para fumar, entre otros aspectos».
«Numerosos estudios científicos demuestran que la concentración de humo en espacios cerrados, como los coches, es muy nociva para los pulmones en desarrollo de los niños y niñas y que incluso las partículas cancerígenas permanecen adheridas a la tapicería durante mucho tiempo», ha explicado el presidente del CGE, Florentino Pérez Raya, en el escrito de alegaciones.
«Un país que se considere avanzado debe proteger la salud de su ciudadanía, y especialmente de la población infantil, con medidas efectivas para evitar en ellos los efectos nocivos del tabaco. Entre esas medidas seguimos apostando por la prohibición de fumar en los coches, y más si en ellos viajan niños y niñas», ha subrayado el presidente de las enfermeras.
En este sentido, Pérez Raya recuerda que está demostrado que, de las 7.000 sustancias que contiene el humo del tabaco, al menos 250 son muy nocivas y 70, además, cancerígenas. «Además, existen estudios científicos que evidencian que el hecho de abrir la ventanilla del conductor no evita el daño, pues el humo sigue concentrándose en el interior del coche», ha añadido.
'Coche sin humo'
El CGE señala que esta petición no es nueva: ya en el año 2018 lanzó la campaña 'Coche sin humo', desarrollada en el ámbito escolar, con el propósito de convertir a los menores en agentes de salud, hablándoles de los perjuicios del tabaco para los fumadores, tanto activos como pasivos, para que posteriormente se convirtiesen en correa de transmisión de esos mensajes en el ámbito familiar.
El objetivo final del CGE es generar conciencia social para reclamar la prohibición de fumar en los vehículos particulares. De hecho, apuntan que, según datos de la Organización Mundial de la Salud, el 30 por ciento de las muertes por tabaquismo pasivo en el mundo se da en los niños y es responsable de un gran número de problemas, entre los que se encuentran sibilancias, tos crónica, asma, bronquitis, infecciones severas, neumonía, otitis e incluso obesidad o cáncer.
Papel de las enfermeras
Desde el CGE también se solicita que en el texto final del anteproyecto se incluya el «imprescindible papel» que desempeñan las enfermeras en este campo, «reconociendo su posición y sus funciones y potenciándolas, en ámbitos como la educación de la salud para prevenir el consumo ya desde edades tempranas, o la deshabituación tabáquica, donde incluso ya están autorizadas a prescribir fármacos en función de la guía de indicación, uso y autorización de la dispensación de medicamentos sujetos a prescripción médica en este ámbito aprobada por el Ministerio de Sanidad».
«Las enfermeras desempeñamos un papel fundamental en el abordaje del tabaquismo, tanto en su detección como en la ayuda al fumador para que avance en su proceso para dejar de fumar, ofreciéndole recursos que le permitan dar el paso definitivo hacia el cese tabáquico. La proximidad con los pacientes propicia que las enfermeras jueguen un papel fundamental tanto en la identificación de los fumadores, como en el consejo sistemático de abandono, o en el apoyo para dejar de fumar. Por ello, es necesario potenciar su participación en este campo, en beneficio siempre de la salud de los pacientes y de la sociedad en general», concluye Pérez Raya.