Enfermedades zoonóticas como la viruela del mono: qué son y cómo se transmiten

Las enfermedades zoonóticas, también conocidas como zoonosis, son enfermedades infecciosas que pasan de un animal a los humanos. Los patógenos zoonóticos pueden ser bacterias, virus, parásitos o agentes no convencionales y propagarse a los humanos por contacto directo o a través de los alimentos, el agua o el medio ambiente. Según explican desde la Organización Mundial de la Salud (OMS), representan un importante problema de salud pública en todo el mundo debido a nuestra estrecha relación con los animales en el medio agrícola, la vida cotidiana (animales de compañía) y el entorno natural.

De hecho, casi el 16 % de los fallecimientos a nivel mundial se atribuyen a enfermedades infecciosas y, según los Institutos Nacionales de Salud estadounidenses, las zoonosis representan un 60 % de las enfermedades infecciosas conocidas y un 65 % de las enfermedades infecciosas emergentes.

Cómo se transmiten estas enfermedades

Lo cierto es que las enfermedades zoonóticas pueden transmitirse de diversas maneras, dependiendo, en gran medida, del portador del patógeno. Así, es posible contraer una infección de este tipo mediante mordeduras de animales o insectos, manipulación de animales enfermos, el consumo de carne infectada, leche sin pasteurizar o agua contaminada e, incluso, las caricias.

Cómo llegó la viruela del mono a los humanos

El pasado miércoles, 14 de agosto, y tras el brote de viruela del mono o mpox que afectó a Europa el pasado 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha vuelto a declarar esta enfermedad emergencia de salud pública de alcance internacional tras el resurgimiento del virus en África. La nueva variante que está afectando a varios países del continente, ha contagiado ya a 15.000 personas en la República Democrática del Congo (RCD) y se ha cobrado la vida de 548 pacientes. Por este motivo, las autoridades locales y la OMS han comenzado a implementar una serie de medidas para contener la expansión de este peligroso virus.

Actualmente se transmite entre humanos por un contacto con fluidos. Es decir, es más fácil contagiarse cuando entramos en contacto directo con heridas, fluidos corporales, gotículas y material contaminado, como ropa de cama o toallas, de una persona infectada. Sin embargo, la enfermedad llegó primero a la población a través de los animales.

El virus de la viruela del mono se encuentra principalmente en animales salvajes, especialmente en roedores y primates en áreas de bosque tropical de África central y occidental y los primeros casos documentados en humanos se reportaron en 1970 en la República Democrática del Congo.