Ana Redondo protege a Irene Montero y asegura que los fraudes de la ley trans suponen un porcentaje ínfimo

Que al Ministerio de Igualdad se la ha ido de las manos la controvertida norma trans es una realidad. Se ve en los múltiples ejemplos de hombres que han acudido al Registro Civil para cambiarse de género y poder así librarse de una condena, cambiarse en los vestuarios femeninos o ascender en los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Sin embargo, a pesar de las denuncias y de los avisos, Ana Redondo, ministra de Igualdad, asegura que los casos de fraude son «ínfimos».

Cuando la ley entró en vigor, varios políticos y ciudadanos lo advirtieron, pero Irene Montero –al igual que pasó con la ley de 'solo sí es sí'– hizo oídos sordos. El PP vaticinó lo que iba a suceder. Sin embargo, Ana Redondo, al igual que su predecesora, aseguró que «ningún hombre en nuestro país» iba a beneficiarse de la ley. Por ello, lejos de reconocer la realidad, exigió al partido de Feijóo que denunciase ante las autoridades competentes los «supuestos casos de fraude» que ha causado «inseguridad jurídica» a algunas víctimas de violencia por los intentos de sus agresores de cambiarse de género. Meses después, un preso acusado de maltratar a su mujer se cambió de sexo en Oviedo para evitar la ley de violencia de género.

A día de hoy, esta norma se ha convertido en uno de los mayores fraudes de los últimos tiempos. No piensa lo mismo Ana Redondo, quien tras compartir un díptico elaborado por su Ministerio que revela información relativa al cambio registral de sexo, ha defendido a Montero en su cuenta de X asegurando que «suponen un porcentaje ínfimo y, por supuesto, se persiguen». Así, ha recordado que los derechos deben ejercitarse «conforme a las exigencias de la buena fe. Es un principio básico de derecho».

Tras su publicación, las críticas no han parado de crecer. Una de ellas ha sido de la Asociación Contra El Borrado de las Mujeres, quien ha preguntado a la ministra: «¿Cuántos casos son pocos? ¿Cuál es el número ideal para que sean demasiados? ¿Los derechos de cuántas mujeres deben ser vulnerados para que sean muchas? No insista, ministra. Si no hay alteración de obligaciones y requisitos, no hay fraude. Como la ley no estipula».

Otros afirman que los «pocos, según la señora, son crema». Porque, prosigue, «no es que se nos cuele un alemán borracho, es que se cuelan pederastas, violadores y maltratadores, pero, oye, no los suficientes para ella».

Más de más de 5.000 cambios en 2023

En menos de un año, según una resolución del Portal de Transparencia facilitada a este medio con fecha de 19 de febrero de 2024, el número de inscripciones practicadas en los Registros Civiles relativas al cambio registral de la mención relativa al sexo durante el ejercicio 2023 asciende a 5.139. Estas cifras muestran un aumento cuatro veces mayor al que se dio en el año 2022.

Además, los cambios registrales no se repartieron de una forma equitativa. El reparto fue muy dispar, ya que un 61,49 % fueron hombres que cambiaron de sexo a mujer y un 38,51 % fueron mujeres que decidieron ser identificadas como hombres.