El Gobierno se ha reunido este jueves con los sindicatos para tratar de llegar a un acuerdo sobre el futuro de Muface. En el encuentro, los organizadores han asegurado de los sindicatos, que ya han empezado a trabajar en una nueva licitación para la atención sanitaria de los mutualistas «más atractiva», después de que quedara desierta la anterior convocatoria, según fuentes sindicales. A pesar de la propuesta, los sindicatos no han quedado satisfechos y algunos han amenazado con movilizarse.

Ha estado presidida por la secretaria de Estado de Función Pública, Clara Mapelli. También han participado en ella los sindicatos CCOO, CIG, CSIF y UGT, además Myriam Pallarés, directora general de Muface, y representantes de los Ministerios de Educación, de Inclusión y de Hacienda, así como de la Dirección General de la Policía.

Este encuentro se ha producido después de que el pasado martes quedara desierto el concurso para dar asistencia sanitaria a los mutualistas de Muface, ya que a ninguna compañía, ni siquiera las tres que prestan el servicio en la actualidad (SegurCaixa Adeslas, Asisa y DKV), les parecía suficiente la subida de las primas del 17,12 % en dos años.

Al finalizar la reunión, Maribel Loranca, responsable de Enseñanza de UGT Servicios Públicos, ha asegurado ante los medios que el Gobierno les ha trasladado que ya ha comenzado a trabajar en una nueva licitación que pueda ser «más atractiva». Asimismo, ha añadido que, se les ha trasladado un «mensaje de tranquilidad», pues, pese a quedar desierta la licitación y tener que convocar otra, la Ley de Contratos Públicos garantiza la asistencia sanitaria «en las mismas condiciones» que las actuales, recoge en declaraciones Europa Press.

A pesar de ello, Loranca ha reclamado «la mejor prestación sanitaria posible» para los mutualistas de Muface, al igual que para el resto de los ciudadanos. Además, ha apelado a un «esfuerzo del Gobierno», pero también a «la responsabilidad social de las compañías aseguradoras sanitarias». Por último, ha advertido de que UGT estará «vigilante» a esa nueva licitación, de la que el Gobierno y Muface no han proporcionado fechas, aunque sí han trasladado a los sindicatos que «se va a empezar a trabajar inmediatamente» en ella.

Desde la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) han señalado que en la reunión se les ha trasladado que se está realizando un nuevo informe de viabilidad económico financiero para una nueva licitación y que hay «mecanismos» que garantizan el mantenimiento de la prestación de servicios mientras se produce esta licitación, si bien no los concretaron, informa Efe.

Al hilo, ha argumentado que las explicaciones son «insuficientes» y la actitud del Gobierno pone en peligro «la viabilidad de esta mutualidad». Por ello, el sindicato mantendrá su campaña de movilizaciones, que se iniciará el próximo 11 de noviembre.

Esta situación no es nueva, ya que las aseguradoras venían advirtiendo de la infradotación del concierto y de que el aumento de 303 millones de euros para el nuevo era insuficiente y les haría incurrir en pérdidas al proporcionar cobertura a un colectivo que supera los 1,5 millones de personas, entre titulares (funcionarios) y beneficiarios (familiares).

Por su parte, Comisiones Obreras (CCOO), ha denunciado que las organizaciones sindicales han sido convocadas para ser «meras espectadoras» y no para solucionar y esclarecer el futuro de Muface. Por ello, ha amenazado con movilizaciones si no se da una respuesta «clara».

Nuevas movilizaciones en noviembre

Tras el fracaso de la reunión con el Ejecutivo, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios ha asegurado que seguirá con la idea de iniciar el próximo lunes 11 de noviembre una campaña de movilizaciones «para defender la atención sanitaria al colectivo de funcionarios adscritos a Muface».

Por su lado, tal y como explica Europa Press, que ha asistido al encuentro, CCOO también ha amenazado con movilizaciones. Además, el sindicato ha exigido conocer «la situación real sobre la nueva licitación» y la necesidad de un estudio exhaustivo de los costes sanitarios que supone la atención a las personas mutualistas. «¡Con la salud de las personas no se juega!», han recalcado.