Estados Unidos
El horror del aborto llevado al extremo: un médico presume de practicar abortos a partir del quinto mes
El propio facultativo ha afirmado que las sensaciones de desmembramiento fluyen a través de las pinzas como una corriente eléctrica
En 2022, el Tribunal Supremo de Estados Unidos revocó el caso Roe vs. Wade, que desde 1973 garantizaba el 'derecho' al aborto en todo el país. Desde entonces los abortos siguen aumentando. En 2023, un año después, más de un millón de madres decidieron acabar con la vida de sus fetos. Esta cifra representa el número más alto registrado en más de una década. Los datos no son de extrañar, ya que es un país que tiene médicos como Warren Hern, un abortista de Colorado que se ha jactado de realizar abortos tardíos.
Estas intervenciones, también llamadas abortos del segundo trimestre, ocurren entre la semana 20 de embarazo hasta el momento del parto. Según la Clínica Universidad de Navarra, las causas son variadas, y pueden incluir factores genéticos, infecciones, problemas anatómicos del útero, enfermedades maternas y complicaciones del embarazo.
Aunque estas prácticas tardías no están bien vistas en la sociedad, ya que son operaciones quirúrgicas —solo deberían ocurrir cuando hay una condición médica grave—, Hern ha defendido públicamente su trabajo y recientemente participó en el programa The Michael Shermer Show para hablar sobre su trabajo.
¿Son una necesidad médica?
En la primera pregunta, donde el presentador Michael Shermer le ha preguntado sobre su clientela, él ha respondido que tiene mujeres que vienen a verle «de todo el país» desde que abrió la consulta. También ha señalado que el volumen de pacientes aumentó cuando desarrolló técnicas e instrumentos específicos para realizar abortos tardíos, un procedimiento que ha calificado como «mucho más complejo y que requiere mayor experiencia».
Tras su respuesta, el presentador le ha preguntado si alguna vez había atendido a mujeres en la segunda mitad del segundo trimestre o en el tercer trimestre sin tener problemas médicos. Es decir, que no quería al bebé. Sin ningún escrúpulo, el facultativo ha contestado tajante: «Por supuesto, si la mujer no quiere estar embarazada, no hay justificación para obligarla a continuar con el embarazo».
Ante la insistencia del presentador, que ha aclarado si esos casos ocurren con madres sin afecciones, Hern ha sentenciado que «el problema médico es que está embarazada».
Sociedad dividida
Tras sus palabras, la sociedad se ha dividido. Tal y como apunta InfoCatólica, los grupos provida han argumentado que estas prácticas subrayan «una concepción errónea sobre la necesidad médica del aborto». Además, ha recalcado que, según Casey Fiano-Chesser, en un informe para Live Action, «los abortistas no están matando bebés por emergencias médicas. Lo hacen, simple y llanamente, porque pueden».
Asimismo, el propio facultativo ha descrito alguna vez los horrores de realizar un aborto tardío. En este sentido, lo definió como un proceso en el que «las sensaciones de desmembramiento fluyen a través de las pinzas como una corriente eléctrica», concluye el médico.