El ex primer ministro laborista Gordon Brown pide no legalizar la eutanasia en Reino Unido: «No es la única opción»
La pieza legislativa se debatirá, tras varias idas y venidas por parte de los diputados, el próximo viernes
El próximo viernes, la polémica con la eutanasia culminará en el Reino Unido con su votación en la Cámara de los Comunes. Aunque su veredicto podría estar claro, ya que las encuestas apuntan a una tendencia en contra de la vida, diversos grupos de ciudadanos han denunciado públicamente esta norma. Ejemplo de ello ha sido el ex primer ministro laborista Gordon Brown, quien ha asegurado que esta vía no es «la única opción».
La pieza legislativa, titulada 'Proyecto de ley sobre adultos con enfermedades terminales (final de la vida)', se debatirá, tras varias idas y venidas por parte de los diputados, el próximo viernes.
Una semana antes de la votación, y recordando su pasado, Brown escribió en The Guardian una columna, titulada 'Pasar tiempo con personas en sus últimos días me mostró que no necesitamos la eutanasia, sino una mejor atención al final de la vida', en la que recordó la muerte de su hija recién nacida en 2002. Esta etapa, aseguró, le mostró «el valor y el imperativo de una buena atención al final de la vida».
La pequeña, que perdió la vida a los 11 días de vida debido a una hemorragia cerebral, le enseñó al exlíder laborista a valorar la vida, ya que los días que pasaron con ella fueron «los más preciados hasta el momento». Esta experiencia prosiguió en la columna, le ayudó a ver que no le convencía la «posibilidad de la eutanasia» y a poner en valor la necesidad de unos buenos cuidados paliativos.
A pesar del retroceso que sería aplicar esta polémica ley en el país, el 66 % de los ciudadanos quieren que un médico ayude a un paciente mayor de edad a poner fin a su vida entregándole fármacos que el paciente podría tomar por sí mismo, según la empresa británica de sondeos Ipsos. Por ello, el también escritor del libro Courage of Heroes, apuntó la necesidad de garantizar una buena muerte con cuidados paliativos, porque «la eutanasia no es la única opción». Sin embargo, los ciudadanos no se muestran partidarios porque no es «una estrategia financiada íntegramente».
Tras el dolor de perder a una hija, Brown, junto a su mujer Sarah, estuvieron trabajando de voluntarios en varios hospitales. Allí, se dieron cuenta del verdadero valor de los médicos y personal sanitario y pudieron comprobar de primera mano «cómo es una atención médica sensible y la compasión de los enfermeros» hacia todos y cada uno de los pacientes. En una de esas visitas se encontró con una compañera de clase, la cual, gracias a los cuidados paliativos, estaba viviendo sus últimos días rodeada de «amor, apoyo y ayuda».
Podría incrementar el deseo de morir
Esta nueva propuesta, que no se convertirá en ley hasta el próximo año, posee varios aspectos negativos que «no se han resuelto con el modelo sugerido por dos médicos y un juez de la Corte Suprema». Uno de ellos es la protección a las personas vulnerables y la presión que pueden sufrir estos para pedir la eutanasia.
A esto se le suma un problema también existente en España, que es la carencia de unos buenos cuidados paliativos. En nuestro país alrededor de 100.000 personas con enfermedades en estados terminales mueren esperando este servicio. Por estas razones, concluye, el 70 % de la población quiere priorizar los cuidados paliativos sociales al final de la vida «antes que pensar en la eutanasia».