Escrito remitido por María Blasco a El Debate con sus aclaraciones

Acogiéndose a la ley del derecho a rectificación, María Blasco, directora científica del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), remite a El Debate unos escritos donde aporta los siguientes puntos de vista en relación a varias informaciones.

En primer lugar, en relación al artículo «La directora del CNIO ha dado en su mandato 16,3 millones a empresas vinculadas a personas de su confianza», quiere aclarar:

"Es inexacta la afirmación que se hace el titular y en el interior de la noticia, puesto que no está en mis Funciones la contratación con empresas, ni ningún otro tipo de contratación concerniente a CNIO. Como se indica en el Art. 18 de los Estatutos del CNIO, a la dirección del CNIO corresponden las siguientes funciones:

a) Ostentar la responsabilidad última en temas científicos sobre las actividades del CNIO.

b) Ostentar la representación del CNIO en cuanto a reuniones institucionales, congresos y cualesquiera otros actos de naturaleza semejante en los que participa la Fundación CNIO, en ausencia de su Presidente.

c) Formular a la Comisión Delegada las propuestas de actuación en relación con la política científica, docente y de investigación del Centro, previo informe del Comité Científico Asesor, y ejecutar los acuerdos adoptados, al efecto, por el Patronato.

d) Elaborar, para su elevación al Pleno del Patronato, el plan estratégico de actuación y dirigir su ejecución.

e) Informar al Patronato de los resultados de los proyectos científicos.

f) Preparar el borrador de la memoria anual de actividades.

g) Cualquier otra función que el Patronato o su Presidente le encomienden".

Sobre la información «El CNIO se niega a experimentar los fármacos en animales a pesar de la insistencia de los científicos», aclara:

"El titular y el contenido de la noticia constituyen una información basada en hechos inexactos, cuya difusión está causando un importante perjuicio a la institución de la que soy directora científica, el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO). Los hechos sobre los que se solicita la rectificación son los siguientes:

Primero. El titular del artículo afirma: 'El CNIO se niega a experimentar los fármacos en animales a pesar de la insistencia de los científicos'. Esta información es falsa. En el CNIO, como en todo centro de referencia internacional en investigación oncológica, se utilizan modelos animales cuando así lo requiere el proyecto de investigación, cumpliendo siempre los máximos estándares de bienestar animal. Así se indica en la página web del CNIO: 'El bienestar animal es por tanto uno de los pilares de nuestra investigación, que recurre a modelos animales solo cuando no hay alternativas experimentales para responder cuestiones científicas relevantes. Todos nuestros proyectos de investigación animal son supervisados y evaluados Comité de la Ética de la Investisación y Bienestar Animal, así como por un Comité Institucional de Cuidado y Uso de Animales de Experimentación'.

Segundo. En el artículo se afirma: 'Además, en el convenio de colaboración, al que ha accedido El Debate, no solo no se especifica la cantidad de dinero que recibirá la fundación, sino que tampoco se encuentran las responsabilidades que, asumirá. Únicamente muestra que se integra en 'un programa de colaboradores al que la organización oncológica asigna la cifra de 2,4 millones de euros en sus estados financieros anuales'.

El CNIO tiene el compromiso de seguir las recomendaciones del Parlamento Europeo de usar métodos alternativos a la experimentación animal siempre que sea posible. En este contexto se enmarca la donación de 20.000 euros de la Fundación Franz Weber a Amigos/as del CNIO para contratar un investigador que desarrolle métodos alternativos a la experimentación animal".

En relación a la información «La directora del Centro contra el Cáncer incluyó en un programa de 2,4 millones a la fundación animalista donde trabaja su pareja», expone:

"Primero. El titular del artículo afirma: 'La directora del Centro contra el Cáncer incluyó en un programa de 2,4 millones a la fundación animalista donde trabaja su pareja'. Esta información no es cierta. Ruth Toledano no trabaja en la Fundación Franz Weber.

Segundo. El artículo afirma: 'María Blasco (...) incluyó en un programa de 2,4 millones de euros a una fundación animalista que pide restringir el uso de animales para las investigaciones científicas. Dentro de esta entidad colabora de manera asidua Ruth Toledano, pareja de Blasco'. Esta información no es cierta. Es la Fundación Franz Weber la que aportó fondos al CNIO para promover la experimentación sin animales, no al contrario. Con ese acuerdo, la Fundación pasó a formar parte de la comunidad de Amigos/as del CNIO, una iniciativa puesta en marcha a finales de 2014 para acercar la investigación del cáncer a la sociedad y fomentar la filantropía como fuente de financiación adicional para la ciencia. Hasta esa fecha, la iniciativa había recaudado 2,4 millones de euros y reunido a más de 2.000 donantes, entre particulares, empresas y asociaciones. La Fundación Franz Weber fue, pues, donante del CNIO.

Tercero. El artículo afirma: 'Toledano, pareja de Blasco, fue metida hace tres años en el programa Amigos del CNIO'. Esta información no es cierta. Ruth Toledano no ha sido 'metida' en Amigos del CNIO ni tiene nada que ver con Amigos del CNIO.

Cuarto. El artículo afirma: 'La directora del Centro está en el punto de mira desde hace varios días por el desvío de dos millones de euros para la compra de cuadros y esculturas' y 'las irregularidades que giran en torno a la gestión de Blasco al frente del Centro contra el Cáncer. Entre ellas se encuentran el desvío de dos millones de euros para la compra de obras de arte'. Esta información no es cierta. No es cierto que el CNIO compre obras de arte. La iniciativa CNIO Arte se financia externamente con las aportaciones que hace una fundación privada con ese fin expreso".

También indica: "El artículo afirma: '(...) con Ruth Toledano, colaboradora del programa de compra de arte por el que Blasco está siendo objeto de críticas'. Ruth Toledano no es 'colaboradora' del programa CNIO Arte. El artículo afirma: '(...) esta entidad ha gastado casi dos millones de euros en la compra de cuadros y esculturas mientras su personal solicitaba más fondos para poder investigar tratamientos contra el cáncer'. No es cierto que el CNIO compre obras de arte. La iniciativa CNIO Arte se financia externamente con las aportaciones que hace una fundación privada con ese fin expreso.