¿Por qué cada vez mueren menos personas por el consumo de fentanilo? ¿Se ha reducido su consumo?

Estados Unidos está envuelto en una gran crisis de sustancias sintéticas. El fentanilo está acabando con la población del país. A día de hoy es la principal causa de muerte entre los estadounidenses con edades entre los 18 y 45 años. Se trata de una de las mayores drogas de la historia, por encima de la heroína y la morfina. Sin embargo, el número de muertes es más bajo, ¿la causa? Un medicamento disponible en Europa y EE.UU.

El fentanilo es un analgésico extremadamente fuerte, utilizado y recetado por médicos a pacientes con dolores intensos, crónico y que presentan tolerancia física a otros opioides. Por ello, es muy importante ingerirlo bajo supervisión médica y no sobrepasar nunca la dosis necesaria. Si se toma el fármaco de forma justificada y recetado por un médico, no habría problema. Lo grave sucese cuando se convierte en un habitual.

Como explica The New York Times, los expertos han atribuido la disminución de muertes por fentanilo a la naloxona, más conocido por Narcan, su nombre comercial. Según la ficha técnica del Ministerio de Sanidad de España, este fármaco se usa para varias indicaciones.

En primer lugar, para la reversión total o parcial de la depresión del sistema nervioso central y especialmente de la depresión respiratoria causada por opiáceos naturales o sintéticos. También se puede inocular en el diagnóstico de la sospecha de sobredosis o intoxicación agudas por opiáceos, como es el fentanilo. Por último, está indicado para la reversión total o parcial de la depresión respiratoria o del sistema nervioso central en el recién nacido cuya madre haya recibido opiáceos.

Este químico, creado para salvar la vida de aquellas personas que consumen fentanilo y otras drogas sintéticas, puede inyectarse por vía intravenosa o intramuscular. Aunque de las dos hacen efecto, es más efectiva y rápida por intravenosa, por lo que los expertos recomiendan este método de administración en los casos más graves donde la persona está a punto de perder la vida. En adultos, la dosis indicada va de 0,1 a 0,2 miligramos. Si el paciente está crítico, pueden inocularse inyecciones adicionales con intervalos de dos minutos hasta que este recupere la respiración.

A pesar de los esfuerzos por reducir las muertes, el consumo de fentanilo sigue en aumento. Cada vez más personas consumen esta fatal sustancia. En cifras, según el informe de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes en España, en 2021, último año con datos, fueron consumidos unos 124,6 kilogramos de esta sustancia, un 11,8 % del total mundial. Además, nuestro país fue el segundo que más opiáceos de este tipo importó al resto de países ese año, por detrás de Alemania.

A pesar de que su uso sin receta es ilegal, varias personas lo consumen de forma descontrolada, perjudicando así su vida. Además, su gran adicción beneficia al mercado negro y a sus traficantes, los cuales mueven esta sustancia de un lugar a otro sin ningún tipo de remordimiento, conscientes de que el fentanilo es 100 veces más fuerte que la morfina y 50 más que la heroína.