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Tasa de mortalidad por calor

Estas son las provincias donde muere más gente por el calor

Por países de Europa, Italia, España y Alemania son los que más número de decesos por esta causa tuvieron durante el verano de 2022

El verano pasado batió todos los récords en cuanto a temperaturas, siendo el más caluroso jamás registrado en Europa y con una consecución de olas de calor que comenzaron en mayo y se extendieron a lo largo de todo el período estival, trayendo también consigo sequía e incendios forestales.

Asimismo, los fallecimientos se multiplicaron durante ese verano. Eurostat ya notificó ese incremento en los decesos, pero ahora un estudio español liderado por ISGlobal y publicado en Nature Medicine ha podido ponerle cifras a esas muertes causadas por el calor. Según explican, entre el 30 de mayo y el 4 de septiembre de 2022 se produjeron 61.672 muertes atribuibles al calor.

«Las temperaturas registradas en el verano de 2022 no pueden considerarse excepcionales, en el sentido de que podían haberse previsto siguiendo la serie de temperaturas de los años precedentes, y que muestran que durante la última década el calentamiento se ha acelerado», explica Joan Ballester, primer autor del estudio e investigador de ISGlobal.

Un número que varía en función del país europeo y, dentro de España, de la provincia en cuestión. En el mapa superior se observa cómo los territorios más oscuros fueron los que tuvieron más fallecimientos por millón de habitantes. Lo encabeza la provincia de Zamora, con 587, seguida por Orense, con 466 y Cáceres con 460.

A pesar de no registrar los mayores valores de España, las tres provincias documentaron temperaturas muy altas durante el 2022: en Zamora se batió el récord con 41,1 grados, en Cáceres se notificaron 43,4 °C y en Orense llegaron a 44 °C.

Entre las ciudades siguientes destacan varias de Castilla y León: Ávila, con 436 muertes por millón de habitantes; Palencia, con 425; León, con 410; y Salamanca con 410. Les siguen con datos igualmente altos Ciudad Real (403), Lugo (391), Soria (389) o Badajoz (344).

En la parte baja de la tabla, por el contrario, se encuentran todas las islas canarias: El Hierro, con 20 muertes por millón de habitantes; Fuerteventura, con 42; Lanzarote, con 8; La Palma con 75; Gran Canaria, con 93; Tenerife, con 103; y La Gomera, con 134. Igualmente, encontramos provincias andaluzas en las que las temperaturas no son tan extremas, como Almería (161) y Cádiz (164).

Países con mayor número de muertes

Tal y como se desprende de la investigación, en términos absolutos el país con mayor número de muertes atribuibles al calor a lo largo de todo el verano de 2022 fue Italia, con un total de 18.010 muertes, seguido de España (11.324) y Alemania (8.173).

Por detrás se quedaron otros países como Francia (4.807), Reino Unido (3.469), Grecia (3.092), Rumanía (2.455) o la vecina Portugal (2.212). Como es obvio, en los países en donde menos calor hace el dato de fallecimientos es más bajo, como Islandia (0), Noruega (30) o Suecia (40).

No obstante, si se atiende a la tasa de mortalidad por calor, la lista la sigue encabezando Italia, con 295 muertes por millón, seguida de Grecia (280), España (237) y Portugal (211), y estando la media europea en 114.

Grupos de mayor edad y mujeres

Por edad y sexos, el trabajo muestra un incremento muy marcado de la mortalidad en los grupos de edad más avanzada, y sobre todo en las mujeres. Se estima que se produjeron 4.822 muertes entre menores de 65 años, 9.226 muertes entre los 65 y los 79 años, y 36.848 entre los mayores de 79 años.

Si atendemos solo al sexo, los fallecimientos por calor fueron un 63 por ciento superiores en mujeres que en hombres –35.406 de ellas frente a los 21.667 estimados en el caso de ellos–. Esta mayor vulnerabilidad de las mujeres al calor se observa en el conjunto de la población y, sobre todo, en mayores de 80 años, donde la tasa de mortalidad es un 27 % superior a la de los hombres. En cambio, la tasa de mortalidad masculina es un 41 % más elevada en menores de 65 años, y un 13 % mayor entre los 65 y los 79 años.

Unos datos que ponen de relieve la importancia de la prevención y adaptación de los países a estas condiciones extremas que cada vez se repiten más a menudo: «El hecho de que en el verano del 2022 muriesen más de 61.600 personas en Europa por calor pese a que muchos países ya contasen con planes de prevención activos, sugiere que las estrategias de adaptación de las que disponemos en la actualidad pueden ser todavía insuficientes», sostiene Hicham Achebak, investigador del Inserm y de ISGlobal y último autor del estudio.