Del cambio climático a los regadíos: así son las propuestas de los partidos en materia medioambiental

El medio ambiente juega un papel importante en las elecciones generales del próximo domingo, pero tanto en el cara a cara entre Sánchez y Feijóo como en el día a día de la campaña parece haber quedado relegado a un segundo plano. Todos los países de nuestro entorno buscan avanzar hacia una menor producción de gases de efecto invernadero, pero la manera de conseguirlo difiere entre unas posiciones políticas y otras.

España se encontraba en 2021 en un nivel de emisiones similar al de 1990, algo que la Ley de Cambio Climático que el Gobierno aprobó hace dos años pretende reducir un 23 por ciento para 2030. Esto también viene contemplado el Acuerdo de París, aprobado en 2015 con el apoyo del Ejecutivo de Mariano Rajoy dentro del marco de la ONU y que establece medidas para la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.

El acuerdo busca mantener el aumento de la temperatura global promedio por debajo de los dos grados y perseguir esfuerzos para limitar el aumento a un grado y medio, reconociendo que esto reduciría significativamente los riesgos y efectos del cambio climático. Un pacto que suscriben todos los partidos salvo Vox, que quiere abandonarlo.

PSOE: transporte público gratis

Entre las apuestas del PSOE de Pedro Sánchez en materia medioambiental se encuentra precisamente lo contrario: revisar periódicamente y al alza los compromisos de la ley de cambio climático, así como la protección del 30 % de los espacios terrestres y el 30 % de los marinos para el año 2030.

Asimismo, los socialistas proponen la ejecución de los marcos de actuaciones de Doñana, el Mar Menor, la recuperación de la Albufera de Valencia y el Delta del Ebro y un nuevo plan específico para las Tablas de Daimiel, así como 2.130 millones de euros para la modernización y nuevos regadíos. También que los jóvenes menores de 24 años tengan el transporte público gratis y un plan para facilitar la adquisición de bicicletas eléctricas.

PP: flexibilizar el Pacto Verde

Entre las medidas incluidas en el programa del Partido Popular encontramos la creación de una tasa que pagarán los promotores de los parques renovables para evitar así los atascos en la tramitación de los proyectos. También flexibilizar el calendario del Pacto Verde Europeo e impulsar la protección de los espacios naturales y la biodiversidad, «especialmente en los ecosistemas acuáticos y humedales, como el Mar Menor, Doñana o las Tablas de Daimiel».

Asimismo, proponen una nueva regulación de la franja litoral para regular las actividades humanas y garantizar un aprovechamiento sostenible desde una triple perspectiva ambiental, social y económica. Igualmente, pretenden desarrollar un pacto nacional del agua con todas las CC.AA. para, entre otras cosas, promover un uso más eficiente del agua y de los fertilizantes en el regadío.

Vox: abandonar los acuerdos

Abandonar «todos los acuerdos lesivos para la soberanía energética de España» es una de las propuestas de Vox, con las que pretende rechazar «las imposiciones globalistas» y eliminar todo el gasto público relacionado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030.

También quieren derogar la ley de cambio climático y transición energética y promover la protección del medio natural contemplando el «interés de los españoles». Por otro lado, proponen dejar sin acceso a cualquier tipo de ayuda o subvención a asociaciones y organizaciones ecologistas «radicales».

Sumar: más impuestos al plástico

Por último, Sumar quiere una fiscalidad ambiental «justa», es decir, un gravamen a los beneficios extraordinarios de la industria fósil, a los bienes y servicios de lujo, una tasa al plástico o un impuesto general a las grandes empresas contaminantes.

De igual manera, pretenden llevar a cabo una actuación de emergencia para «salvar y restaurar» el Mar Menor y rehabilitar 500.000 viviendas al año para que sean 100 % eléctricas. Además, proponen incrementar la ambición de la ley de cambio climático, llegando al 55 % de reducción de emisiones en 2030 y eliminar los vuelos domésticos que tengan conexión ferroviaria de menos de cuatro horas.