Europa defenderá en la COP28 la práctica eliminación de los combustibles fósiles
Otros compromisos asumidos por la UE incluyen triplicar hasta 2030 la capacidad instalada de energías renovables y duplicar la eficiencia energética
La guerra contra los combustibles fósiles sigue adelante por parte de los países occidentales. La ambición de estos por llegar a la neutralidad climática pasa por restringir algunos de nuestros hábitos, como es el caso de aquellos que tienen que ver con la quema de combustibles.
Por ello, la Unión Europea (UE) defenderá en la COP28 la eliminación de los combustibles fósiles quemados sin captura de CO2, cuyo consumo mundial alcanzará su punto máximo «esta década», según la posición común del bloque adoptada este lunes.
Los europeos llamaron a eliminar «lo antes posible» las subvenciones a los combustibles fósiles que no sirvan para combatir la «pobreza energética» o una «transición justa», aunque sin fijar una fecha límite como esperaban las ONG.
«La transición a una economía climáticamente neutra exigirá la eliminación de los combustibles fósiles» quemados sin captación de CO2, resumió el Consejo Europeo tras una reunión de ministros de Medio Ambiente de la UE. Al mismo tiempo, la UE abogará por «un sector energético que esté predominantemente libre de combustibles fósiles mucho antes de 2050».
La inclusión de una referencia a la captación de CO2 tras la quema de combustibles generó un enfrentamiento entre los ministros europeos reunidos en Luxemburgo. Ese tema forma parte del mandato de negociación asignado al nuevo comisario europeo de Clima, el holandés Wopke Hoekstra, quien representará al bloque en la COP28 del 30 de noviembre al 12 de diciembre en Dubái.
Una parte del bloque, al igual que las ONG, quería retirar esa referencia o imponer restricciones al uso de tecnologías de captura de carbono, por considerar que servirá de pretexto para seguir quemando combustibles fósiles y brinda un resquicio legal al sector de petróleo y gas.
Eliminación gradual
En lo inmediato, las tecnologías de captación de CO2 serán necesarias pero «deben reservarse a sectores en los que sea difícil desprenderse de los combustibles fósiles para una parte del proceso industrial», explicó tras la reunión la ministra española Teresa Ribera, cuyo país ocupa la presidencia rotativa de la UE.
«El objetivo a largo plazo sigue siendo que los combustibles fósiles se eliminen gradualmente de la matriz energética», insistió Ribera. Los europeos también piden que el mundo aspire a una producción de electricidad «total o abrumadoramente descarbonizada» a partir de «la década de 2030».
Otros compromisos asumidos por la UE incluyen triplicar hasta 2030 la capacidad instalada de energías renovables y duplicar la eficiencia energética acorde con la hoja de ruta del presidente de la COP28.
También debatieron si los europeos deben mantener en Dubái su objetivo vinculante de reducir en 55 % las emisiones de gases de efecto invernadero en la UE para 2030 con respecto a 1990, o defender la reducción de 57 % que deberán alcanzar de hecho dadas las políticas ambientales ya adoptadas.
«Un 57 % sería un anuncio excelente, estaremos demostrando claramente que Europa es líder» en acción climática, declaró el vicepresidente de la Comisión, Marcos Sefcovic.
Los 27 llamarán también a «reforzar los mecanismos de financiamiento» del fondo de pérdidas y daños creado en la COP27 para ayudar a los países pobres. La COP28 intentará llegar a un acuerdo sobre su funcionamiento.
Los europeos señalan «el potencial de los bancos multilaterales de desarrollo y de las instituciones financieras internacionales» y piden que «se movilicen todas las fuentes de financiamiento».