La IA en la veterinaria, un aliado inesperado

Imagino que todo el mundo conoce a los osos panda; imagino también que, más o menos, todo el mundo es consciente de que esta emblemática especie, está actualmente en peligro de extinción, y que numerosas instituciones, asociaciones o gobiernos están haciendo grandes esfuerzos para su conservación. Lo que no creo que mucha gente sepa (puede que sí) es que, uno de los problemas que tienen estos proyectos de conservación del oso panda es el reconocimiento individual de los diferentes animales, ya que sus tiernas caras peludas y su falta de expresiones faciales los hace casi indistinguibles unos de otros. ¿Cree usted que podría distinguir a dos osos panda si los ve juntos? Yo no, la verdad… pues hay alguien que sí, un nuevo aliado para su conservación: la inteligencia artificial. Investigadores de la Base de Investigación de Cría del Panda Gigante, en Chendgu (China) han desarrollado una nueva tecnología utilizando inteligencia artificial que les permite identificar a sus animales, lo que les permite vigilarlos tanto dentro del santuario como en libertad.

La IA ha llegado para quedarse, está abriéndose paso en numerosos ámbitos de la vida, y la veterinaria no iba a quedarse atrás

La IA ha llegado para quedarse, está abriéndose paso en numerosos ámbitos de la vida, y la veterinaria no iba a quedarse atrás. Actualmente existen ya numerosos estudios, iniciativas, aplicaciones o usos, en los que diferentes sistemas basados en IA podrán ayudarnos a los profesionales veterinarios en nuestros diferentes ámbitos de trabajo, campos que están comenzando a experimentar una transformación significativa gracias al desarrollo y la implementación de estas tecnologías inteligentes. Y esto, al parecer, no ha hecho más que empezar. Estas herramientas, basadas en la gestión masiva de datos, el aprendizaje profundo (Deep learning) o el aprendizaje automático (machine learning) permitirán realizar un mejor seguimiento, gestión y una mejora de la vida de los animales en diversos contextos, veamos algunos.

En las granjas, un ganadero podrá predecir la cantidad de grasa y proteínas que tendrá la leche que producen sus vacas, ya hay herramientas con un 80% de efectividad en esta predicción. En los pastos, un dron podrá monitorizar de forma individualizada el comportamiento de cada una de las ovejas de un rebaño de cientos de individuos, siendo capaz así de detectar patologías de una forma precoz, evitando la propagación de enfermedades o una peor calidad de la carne, y, por lo tanto, una mayor rentabilidad, beneficio económico y un mayor bienestar animal.

En las granjas, un ganadero podrá predecir la cantidad de grasa y proteínas que tendrá la leche que producen sus vacas

En las clínicas veterinarias, herramientas de IA podrán ayudar a proporcionar mejores diagnósticos y tratamientos a un gran número de animales, ayudando así al bienestar de las mascotas (y sus propietarios). El avance del uso de la inteligencia artificial en la medicina veterinaria estará estrechamente ligado a los avances en medicina humana, donde se anticipan importantes y revolucionarios desarrollos. Actualmente uno de los usos más prometedores de la IA en salud se encuentra en el apoyo al veterinario clínico en la interpretación de radiografías, TACs o ecografías. En el futuro se prevé que, algoritmos más avanzados podrán no solo diagnosticar enfermedades, sino también recomendar tratamientos personalizados basados en el historial genético y clínico del animal (la llamada medicina de precisión basada en el individuo), mejorando significativamente los resultados de salud.

En las cuadras, los veterinarios equinos podrán apoyarse en alguna IA para la detección objetiva de cojeras en caballos, una de las patologías más frecuentes en estos animales. Los sistemas de IA ayudarán así mismo a los veterinarios durante procedimientos quirúrgicos, proporcionando orientación en tiempo real basada en imágenes médicas preoperatorias. Esto puede ayudar a mejorar la precisión y seguridad de las intervenciones quirúrgicas, especialmente en casos de cirugías complejas o delicadas.

En las cuadras, los veterinarios equinos podrán apoyarse en alguna IA para la detección objetiva de cojeras en caballos

La inteligencia artificial, aplicada al reconocimiento de emociones en animales, ofrece métodos valiosos para el estudio del comportamiento animal. Mediante el uso de técnicas avanzadas de procesamiento de imágenes y aprendizaje automático, será posible analizar e identificar con precisión los estados emocionales de los animales. Esta aplicación permitirá comprender mejor sus experiencias y necesidades emocionales, contribuyendo significativamente a la mejora de su calidad de vida y bienestar.

En la nutrición animal, sistemas automáticos de IA podrán alimentar a nuestras mascotas o animales de granja de forma óptima, para evitar el sobrepeso de nuestros perros o para una mayor eficiencia en la producción de carne, huevos o lana.

En la nutrición animal, sistemas automáticos de IA podrán alimentar a nuestras mascotas o animales de granja

En la inspección de alimentos, sistemas automatizados evaluarán la calidad de la carne y otros productos animales en las líneas de procesamiento, identificando contaminantes o productos que no cumplen con los estándares de calidad. Esto no solo aumentará la seguridad alimentaria, sino que también mejorará la eficiencia de los procesos de producción. La integración de datos a nivel global permitirá respuestas más rápidas y coordinadas a brotes de enfermedades o una mejor precisión en análisis de riesgos.

En la investigación, métodos con el apoyo de IA permitirá la interpretación de secuencias genómicas, lo que podrá ayudar en la lucha contra las resistencias bacterianas o el diseño de nuevos antibióticos.

Mis compañeros patólogos, podrán, en no mucho tiempo, apoyarse en aplicaciones de IA para el diagnóstico forense, dada la cada vez mayor capacidad en el procesamiento de imágenes histológicas de estas nuevas tecnologías.

En el ámbito epidemiológico, la aplicación de técnicas de IA en epidemiología predictiva permite utilizar grandes cantidades de datos para prever la propagación de enfermedades. Esto será especialmente útil en la planificación de estrategias de control y prevención de epidemias en poblaciones de animales. La IA se empleará para analizar grandes conjuntos de datos en estudios epidemiológicos, identificando patrones que podrían pasar desapercibidos para los investigadores humanos.

La aplicación de técnicas de IA en epidemiología predictiva permite utilizar grandes cantidades de datos para prever la propagación de enfermedades

En el campo de la conservación de especies, la inteligencia artificial emergerá como una herramienta fundamental al abordar vastos conjuntos de datos ambientales y de comportamiento animal. Esta capacidad permite no solo prever posibles cambios en los hábitats de especies en peligro de extinción, sino también identificar patrones y correlaciones complejas que podrían haber pasado desapercibidos anteriormente. Por ejemplo, la IA analizará datos de satélites para monitorizar cambios en la cubierta forestal, así como datos de cámaras trampa para comprender los patrones de movimiento y comportamiento de animales amenazados. Esta información predictiva puede ser crucial para la toma de decisiones ágiles y proactivas en la implementación de medidas de conservación, como la restauración de hábitats o la creación de corredores ecológicos, lo que a su vez podría ser determinante para evitar la extinción de especies silvestres en un contexto de degradación creciente de sus hábitats naturales.

Por último, pero no menos importante, en el ámbito de la docencia debemos preparar a las generaciones futuras para la llegada de toda esta nueva batería de herramientas, para evitar anclar nuestras enseñanzas en una realidad que en un futuro no tan lejano puede quedar obsoleta.

¿Debemos preocuparnos? ¿Será nuestra profesión una de las grandes amenazadas por estos avances tecnológicos?

En resumen, el uso de diferentes herramientas de IA en el ámbito de la veterinaria va a ser tan amplias como en el resto de las profesiones. Algunas funcionarán, otras no, pero nos están llamando a la puerta, y debemos por lo menos asomarnos a ver qué tiene que ofrecernos.

¿Debemos preocuparnos? ¿Será nuestra profesión una de las grandes amenazadas por estos avances tecnológicos? Todo parece indicar que no; llevamos cientos de años produciendo, diagnosticando, curando, cuidando, enseñando o inspeccionando, y tanto nuestra intuición, nuestro ojo clínico, o nuestros conocimientos acumulados no deberían verse reemplazados totalmente por estas nuevas herramientas. Más bien, como para los osos panda, la IA ha venido para ser nuestra aliada, para ayudarnos a mejorar aquello que ya sabemos hacer bien, muy bien.

• NOTA DEL AUTOR: En la redacción de artículos de divulgación, este artículo ha sido redactado con la colaboración de Chat GPT.

* Jordi Aguiló Gisbert es Doctor en Veterinaria, profesor de la UCH-CEU y responsable del servicio de animales exóticos del Hospital Clínico Veterinario-CEU. También pertenece al Grupo de Reflexión IA y Salud.