Lo que se juega España si veta a Huawei de su red 5G como exige Bruselas
Desde Europa se pide a España más contundencia en su rechazo a las redes de la empresa China, pero el Gobierno quiere evitar la confrontación
El Gobierno lleva años escurriendo el problema con Huawei. Desde que Trump decidió poner en el foco a la empresa china y acusarla de espionaje, Europa también ha tomado medidas que se han incrementado tras la guerra de Ucrania.
El Gobierno convocó en octubre de 2023 las ayudas para la provisión de servicios de comunicaciones móviles con tecnología 5G en zonas donde no existe cobertura móvil 4G con servicio mínimo de 50 Mbps, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
El Gobierno convocó en octubre de 2023 las ayudas para la provisión de servicios de comunicaciones móviles
Se trata de un paquete dotado con 544 millones que aparece en el BOE con un párrafo que, para el Ejecutivo es suficiente y provoca que los operadores echen a Huawei del mercado sin necesidad de hacer un veto directo a la compañía.
«Los equipos, componentes, integraciones de sistemas y software asociado en los elementos críticos de las redes 5G no serán adquiridos a proveedores que hayan sido designados como de alto riesgo por España», dice el texto que, en su momento, llevó a la empresa china a poner el grito en el cielo y a elevar una queja a la que tuvo acceso El Debate: «Huawei España, como suministrador de equipos de telecomunicaciones legalmente establecido en el país, confía en que el Tribunal abordará las diversas infracciones de la ley y repondrá los derechos e intereses legítimos de la compañía en aras de mantener la competencia en beneficio de los consumidores y usuarios, así como de las empresas de las zonas rurales españolas».
Queja de Huawei
El artículo del BOE en cuestión, según Huawei, «interfiere con la libertad de los operadores para elegir el mejor proveedor sobre la base de criterios objetivos que reflejen requisitos comerciales, técnicos y de seguridad. En su lugar, busca excluir a ciertos suministradores en función de criterios políticos arbitrarios».
El ministro de Transformación Digital, José Luis Escrivá, creía tener resuelto este problema con la Unión Europea, pero, según informa El País, desde Bruselas piensan que no se han tomado las garantías suficientes en España y que hay que incrementar el veto a Huawei de manera más clara para evitar poner en su manos las comunicaciones.
Las telecos que operan en España ya han evitado contratar con Huawei. Es el caso de Movistar que ha desplegado su red de 5G+ en la banda de 3.500 MHz gracias a un acuerdo con Ericsson y Nokia. El Gobierno cree que es suficiente con esa petición, pero Europa pide que sean más concretos, algo que sitúa a España en una posición incómoda con un socio comercial de primer nivel.
Negocios con China
Los datos del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo sitúan a China como el cuarto mayor socio comercial de España en volumen de negocio, tras cerrar transacciones por valor de 57.667 millones de euros en 2022 –un 53,4 % más que en 2020–, solo por detrás de socios europeos como Francia, Alemania e Italia.
El país asiático es también el principal proveedor de bienes y servicios a España, con 49.653 millones de euros en importaciones en 2022 (20.250 millones más que en 2020), frente a tan solo 8.014 millones en exportaciones (169 millones menos que en 2020), lo que deja un desequilibrio de 41.639 millones en la balanza comercial.
Estos números son los que obligan al Gobierno de Pedro Sánchez a no ejercer la mano dura con Huawei como pretende Bruselas. Hay mucho dinero en juego y unas relaciones que mantener. El juego a dos bandas y con normas tan ambiguas no le gusta a Europa.