Las mejores frases de 'Soy Georgina', la serie documental de Georgina Rodríguez en Netflix

«Soy Georgina Rodríguez, tengo 27 años y hace cinco años mi vida cambió». Las palabras que inauguran Soy Georgina no forman, ni de lejos, una de las mejores frases del documental de Netflix sobre Georgina Rodríguez. Sí, son en cambio, directas y esclarecedoras. Tanto que a los pocos segundos de documental ya sabemos que Georgina Rodríguez no esconde que, si ahora es famosa, es por su condición de pareja del futbolista Cristiano Ronaldo.

Aunque no mencione su nombre en esa primera frase de Soy Georgina –que fácilmente se adivina como una estrategia de marketing–, la influencer dedica el primero de los seis capítulos de Soy Georgina, titulado El día que cambió mi vida, a contar cómo conoció a Cristiano Ronaldo.

Quiero esta casa más homogénea. No me pongas flores de plástico, no me pongas libros. No me pongas muchas cosas para no limpiar el polvoGeorgina Rodríguez, a una decoradora en 'Soy Georgina'

Tampoco las mejores frases de Soy Georgina son las que escuchamos poco después, también al principio del primer capítulo. «He pasado de vender lujo a lucirlo en las alfombras rojas». «Muchos conocen mi nombre, pocos saben quién soy». «Sé lo que es no tener nada y sé lo que es tener todo».

Todas ellas también suenan a marketing. Todo lo contrario que una reflexión que, esta sí, merece su inclusión entre las mejores frases de Soy Georgina:

«Dios siempre me iluminó y me dio la fuerza para luchar para saber lo que era bueno para mí».

Las frases más superficiales de Georgina

Al lado de esa trascendental reflexión de Georgina Rodríguez y de otras acerca de la maternidad, muchas otras frases de Soy Georgina suenan aún más superficiales. Aquí van algunos ejemplos:

«Para mí lo mejor de los viajes en el jet de Cris es su tripulación. El jet me facilita mucho la vida. Si tuviese que estar dos horas en un aeropuerto con Cristiano, me volvería loca, no podría estar. Preferiría no viajar».

«Siempre intento llevarme a una de mis amigas a todos mis viajes para que ellas puedan vivir lo que yo vivo. Me gusta compartir».

«Me gusta mezclar un chándal de cinco euros con mi bolso azul. Me gustan las joyas con un chándal, que hay gente que no lo entiende; ya lo entenderá».

«Al hacer la reforma en la casa grande hay muchos muebles que no voy a utilizar y están hechos a medida y son gigantes y no puedo meter en la otra casa, que es más pequeña. Le he pedido si sabe de alguna página para venderlos. Estos muebles no caben en todas las casas. Me imagino que será alguna aplicación de venta de muebles más grandes o de lujo. No puedo meter esto en Wallapop».

La siguiente frase, como la anterior, se la dirige Georgina Rodríguez a una decoradora a la que recibe en su casa para explicar los cambios que desea en su hogar. «Quiero esta casa más homogénea. No mezcles estampados con mármol, con luces… No me pongas flores de plástico, no me pongas libros. No muchas cosas para no limpiar mucho el polvo». La frase, dentro de su categoría, es insuperable.