Fundado en 1910
Jorge Javier Vázquez y Belén Esteban/Mitele

Jorge Javier Vázquez y Belén Esteban/Mitele

Televisión

¿Acabará la caída de audiencia con el circo de 'Sálvame'?

Al bajón de audiencia de Sálvame Limón Tea y Sálvame Naranja se une el fracaso de Viernes Deluxe, que fue barrido por la final de Tu cara me suena

Desde la irrupción de Gran Hermano en el año 2000, la programación de Telecinco se ha sustentado en dos columnas: los realities y los programas del corazón. Alrededor de esos dos tipos de espacios ha orbitado tradicionalmente la parrilla de programación de Telecinco, que ha llenado una ingente cantidad de horas de televisión con las polémicas de sus programas de telerrealidad y con formatos como Sálvame.

Los informativos, las series de televisión y algún concurso –la pérdida de Pasapalabra en dirección a Antena 3 fue un duro golpe para Mediaset–, que en otras cadenas han ejercido (y ejercen) como pilares de su programación, eran algunas de las pocas islas de Telecinco en las que no desembarcaban los contenidos de los realities ni de la prensa rosa.

Después de tantos años de explotación, los dos pilares de Telecinco amenazan derrumbe. El que representan los realities, desde hace años. Antes incluso de que Gran Hermano dejase de serlo tras la supuesta violación de la concursante Carlota del Prado en Gran Hermano Revolution. El otro pilar, el de los programas del corazón –en realidad, el programa del corazón (Sálvame) y sus versiones–, desde hace meses. De forma más intensa, en las últimas semanas.

La caída de audiencia de 'Sálvame'

La última emisión de enero de Sálvame, la del día 31, contó con 1.407.000 espectadores y un 12,9 % de cuota de pantalla en su edición Sálvame Lemon Tea y con 1.816.000 personas y un 17,9 % de share con Sálvame Naranja.

Apenas un mes después, el 28 de febrero, los datos de audiencia de los dos formatos reflejaban una estrepitosa caída: 782.000 espectadores y un 7,4 % de cuota de pantalla para Sálvame Lemon Tea y 1.187.000 seguidores y un 12,1 % de share para Sálvame Naranja. La estrategia de colocar capítulos repetidos de Pasión de gavilanes en la franja de tarde, lejos de impulsar la audiencia de Sálvame, la empeoró. La telenovela se quedó entonces en 738.000 espectadores y una cuota de pantalla del 7 %.

El mal dato de 'Viernes Deluxe'

El gran impacto en la línea de flotación no llegó, sin embargo, en la emisión vespertina habitual de Sálvame. La acidez no llegó con la naranja ni con el limón, sino el pasado viernes por la noche con Viernes Deluxe. El especial dedicado a Rocío Jurado (Viernes Deluxe: Lo siento por mi amor) se quedó en 891.000 espectadores y un 9,1 % de cuota de pantalla.

La comparación con Antena 3 en la misma franja dejó malparada a Telecinco. La final de Tu cara me suena, que deparó el triunfo de Agoney, se fue hasta los 2.737.000 espectadores y el 25,4 % de share. Son casi dos millones de personas y más de 16 puntos de diferencia entre las dos cadenas de televisión con más audiencia en España.

Los problemas de Mediaset

A Mediaset se le juntan los problemas. Ya no le interesa tanto Rocío Carrasco después del éxito con el que aterrizó Rocío, contar la verdad para seguir viva; ha rescindido el contrato de Paz Padilla tras su discusión con Belén Esteban en el plató de Sálvame; ve cómo Antena 3 ha ganado en febrero, por cuarto mes consecutivo, su pulso por liderar las audiencias; y sus dos pilares, los realities y Sálvame, se tambalean.

Al complicado horizonte que se le presenta a Sálvame hay que unir las voces críticas que piden desde hace tiempo la cancelación del programa. Por ejemplo, tras la polémica suscitada por la ocurrencia de recrear la autopsia de Mario Brondo, el exmarido de Raquel Sánchez Silva, utilizando un maniquí en el plató de Sálvame. Por si fuera poco, en horario protegido.

Volvemos a la pregunta de partida. ¿Peligra Sálvame? La respuesta quizá haya que encontrarla en otra pregunta: ¿Con qué llenaría Telecinco su programación de tarde si cancela Sálvame? Y como para esta pregunta es difícil encontrar respuesta, la primera cuestión se contesta, a corto plazo, con un no. Eso sí, con uno no tan rotundo como el que habríamos imaginado cuando Sálvame no tenía rival por las tardes y tenía tirón por las noches. De eso no hace tanto tiempo.

Temas

comentarios
tracking