Norma Duval vuelve a amenazar con irse de 'MasterChef': «Yo sobro aquí»

Se lo dijo primero a Samantha Vallejo-Nágera: «Me quiero ir, sí, me quiero ir». La chef y jurado pidió a una Norma Duval desencajada que explicase los motivos por los que quería tomar las de Villadiego: «Porque es brutal el ataque». Eso decía la vedete, harta de sus compañeras. Mejor dicho, de algunas de ellas. El volcán Norma Duval volvió a entrar en erupción en MasterChef Celebrity. No es la primera vez, pues ya en la gala anterior amenazó con irse. Y, como aquella vez, la sangre no llegó al río.

De batalla en batalla

La noche se abrió con una de las pruebas clásicas de MasterChef: la de las batallas. De entrada, los aspirantes dispusieron de veinte minutos para hacer un ceviche. Los peores fueron enviados a la galería: Pepe Barroso, Xavier Deltell, Daniela Santiago y Norma Duval. El resto, incluida la mejor de la prueba (María Escoté) continuaron en liza. Después tocó hacer un guacamole en quince minutos. En este caso, Manu Baqueira, María Zurita y Fernando Andina fueron los eliminados, y Lorena Castell resultó ser la vencedora del reto. Así que la siguiente batalla, consistente en elaborar un mini suflé de naranja y un helado de aceite de oliva, la disputaron Nico Abad, Isabelle Junot, María Escoté y la ya citada Castell. Ganaron los dos primeros, que se midieron en el duelo definitivo.

Antes de ese enfrentamiento, los chefs anunciaron que estaba en juego el pin de la inmunidad. El problema es que se sumó al duelo María Lo, ganadora de la última edición de anónimos. Tras contarnos una desgracia familiar, fue ella la que elaboró el mejor postre de los tres y, por tanto, dejó a Nico Abad –el segundo mejor– y Isabelle Junot sin el preciado pin.

Lío en Álava

A continuación, los aspirantes se trasladaron a las salinas de Añana (Álava), a 30 kilómetros de Vitoria, una de las fábricas de sal más antiguas del mundo (más de 6.500 años de historia).

Daniela Santiago (capitana), Isabelle Junot, María Zurita, Fernando Andina y Nico Abad formaron el equipo azul.

El rojo lo integraron Norma Duval (capitana), Manu Baqueiro, Lorena Castell, María Escoté y Pepe Barroso.

Xavier Deltrell ejerció de sazonador para ambos conjuntos.

Enseguida empezó el fuego amigo en el equipo rojo. María Escoté y Lorena Castell corregían a Norma, que se enfadaba: «Soy la capitana, ¡fuera! ¡Al dulce! ¿Qué cachondeo es este? Hay personas que solo buscan el protagonismo». Se refería especialmente a Castell, a la que al rato le dijo: «Si quieres ponerte la corona de capitana, póntela». «No, no quiero ser capitana. Quiero que reconozcas tus errores», contestaba la presentadora.

La vedete se hartó. «Yo he dejado de sentirme integrada y siento que hay unos grupos más o menos organizados ya y yo sobro aquí». Pero siguió al pie de los fogones.

En el emplatado volvieron los problemas, tras una corrección de la diseñadora de modas.

Norma Duval: En este equipo todo el mundo manda. Es un aburrimiento.

María Escoté: Manda, porque sino…

Norma: No contéis conmigo más porque esta experiencia me ha superado.

María: Absolutamente.

Norma: Absolutamente, María.

María: De verdad, Norma. Reconócelo, no pasa nada.

Norma: ¿Qué te estoy diciendo?

María: Que estás superada.

Norma: Pues ya está.

Cuando les tocó plantarse ante el jurado, que iba a emitir su veredicto, volvieron las tensiones. «Se han rebelado desde el minuto cero. Yo soy hija, hermana, sobrina y prima de militares. Y soy una persona que, cuando alguien tiene la capitanía, la respeto. Y hoy a mí una gran parte no me ha respetado», se quejó la vedete. Sus cuatro compañeros –y no solo las dos mujeres– criticaron su actitud durante el cocinado, y al final no le quedó más remedio que reconocer que lo había hecho mal.

La sorpresa llegó después. Como el equipo azul lo hizo fatal, ganó el rojo, con María Escoté como mejor aspirante. De entrada, Norma ni lo festejó, pero después se sumó a los saltos del corro de ganadores.

Sorpresa final

Así que a la prueba de eliminación cayeron, de entrada, Daniela Santiago, Isabelle Junot, María Zurita, Fernando Andina y Nico Abad.

La presencia de Zurita convertía a Norma Duval en la única que no ha participado todavía en la prueba de eliminación. Presumió de ello, y después analizó, ya en frío, lo ocurrido en la prueba de exteriores. Lo justificó por su temperamento y el de sus compañeras: «Somos muy volcán». Pero es cierto que le quedó un regusto amargo: «Ha sido de los momentos más duros de mi vida». Escoté y Castell restaron miga al asunto y Norma hasta acabó echando una lagrimita de emoción.

Pero ahí no acabó la noche de la vedete. Estaba tan pancha en la galería, junto al resto de los salvados, cuando los chefs propusieron a la diseñadora si quería salvar a alguien de los que iban a competir en la prueba final.

Eligió salvar a Daniela Santiago.

Una vez que lo hizo, le indicaron que el mandilón negro que acababa de quitar se lo tenía que entregar a alguien de la galería, que empezará vistiéndolo en la siguiente gala. Escoté se lo entregó a Norma, con la excusa de que, como es la única que no ha participado en el reto eliminatorio, es hora de que sepa a qué sabe eso de verse al borde del adiós.

La vedete dijo que lo entendía, pero sus gestos delataban que no el regalito no le gustó nada de nada.

En la prueba final, el eliminado fue el actor Fernando Andina, quinto expulsado de una edición marcada por la volcánica Norma Duval.