Ana Rosa, sobre los datos de audiencia de 'TardeAR': «Podríamos haber ido mejor»

Desde la pasada primavera ha sido continuo el baile de movimientos que se han producido en Telecinco. Desde entonces, el objetivo de la cadena de Fuencarral ha sido reinventarse para poder lograr una mayor fidelización de la audiencia, esa que había decaído en los últimos tiempos. El pasado lunes, 18 de septiembre, Ana Rosa Quintana estaba de vuelta. La reina de las mañanas reapareció en televisión con la única misión de hacerse con el trono ahora en las tardes con su nuevo programa, TardeAR. «A los espectadores que están en su casa, que nos están viendo en el trabajo, sentados en el sofá, tomando un café, en el iPad, en el teléfono o como sea, pero que estén con nosotros. Para mí hoy es una primera vez. Otra primera vez. Después de dieciocho años dándoos los buenos días, hoy comienzo a darles las buenas tardes», dijo nada más arrancar la emisión.

Se puede decir que el magacín arrancó con luces y sombras. En medio de la emisión de la tarde del martes, Ana Rosa se levantó de su asiento en pleno directo y se dirigió a la grada en la que estaba sentado su sobrino Kike, al que acompañaba su productor ejecutivo en Unicorn Content Juan Serrano. «¿El programa de hoy está a vuestro gusto? ¿Hay algo que hay que cambiar?», se interesó Quintana antes de que Kike destacara las palabras con las que la periodista Rosa Conde despidió su conexión por Skype desde Miami. «Ha dicho: ‘¡Muchas felicidades por los datos de audiencia de ayer!’ Esta tía es una cachonda», soltó irónico el familiar. «Pero si fuimos bien», respondió seria la comunicadora. «Hombre...», insistía Kike a lo que Ana Rosa respondió que «podríamos haber ido mejor».

TardeAR debutó por encima de la media de Telecinco, ganó la partida a Antena 3 y fue el programa más visto durante sus casi tres horas de duración, pero no consiguió lo más importante: liderar su franja de emisión, que es el principal baremo para medir el impacto de esta gran apuesta del holding italiano. En cifras, el espacio conducido por Ana Rosa logró un 11,3% de cuota y 905.000 espectadores (de 17:00 a 19:54h), por lo que superó en 1.6 puntos la media de Telecinco durante la jornada. Por su parte, Y ahora Sonsoles arrancó la semana con un 11,1% de share y 828.000 seguidores.

En su segundo día de emisión, el programa de Ana Rosa perdió telespectadores. La segunda entrega anotó un 10,4 % de cuota y 813.000 espectadores, lo que supone un descenso de 9 décimas y 92.000 seguidores respecto al lunes. Sin embargo, se mantiene por encima de la media de Telecinco (9.9 %). Por su parte, el programa de Sonsoles Ónega en Antena 3, Y Ahora Sonsoles, registró una cuota de pantalla del 12,6 %.