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El realizador Pedro Almodóvar y Penélope Cruz, durante la ceremonia de entrega de la 38.ª edición de los Premios Goya

Cine

Las cifras que desmontan el discurso de Almodóvar: 167 millones invertidos en 2023, el doble de lo recaudado

A lo largo de 2023 se recaudaron apenas 80,8 millones de euros, según los datos del Ministerio de Cultura

«Ese dinero que recibimos lo devolvemos con creces al Estado». Con esta frase Pedro Almodóvar quiso contrarrestar las palabras del vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, que se refirió a los cineastas como «señoritos que quieren vivir de producir obras cinematográficas que luego no ve nadie».

Unas declaraciones que no debieron de sentar demasiado bien al director castellanomanchego. Almodóvar, en un nuevo alarde, quiso sacar pecho en la gala de los Goya de este 2024 hasta tal punto de propagar una nueva mentira sin consultar previamente los datos sobre los ingresos y gastos derivados del cine español.

Si atendemos únicamente a las cifras de 2023, observamos como no solamente las películas españolas no llegan a igualar a las subvenciones –que provienen del dinero público–, sino que incluso conllevan gastos millonarios para la economía española.

A lo largo del año pasado, el Ministerio de Cultura invirtió 167 millones de euros en su programa de subvenciones cinematográficas, cifra récord en comparación con los últimos ejercicios.

Como tal, estamos ante unas datos realmente bajos si comparamos con otros países como Francia o Estados Unidos. Sin embargo, el balance de ingresos-gastos es desgarrador. A lo largo de 2023 se recaudaron apenas 80,8 millones de euros según los propios datos del ministerio dirigido por Ernest Urtasun. A pesar del incremento de 20 millones con respecto al ejercicio anterior, los datos dejan claro que la producción de películas en nuestro país es un gran agujero negro económico, con unas pérdidas de 86 millones de euros en 2023.

Crecen las ayudas sin ingresos estables

Uno de los grandes problemas que se pueden desgranar de los datos mencionados es el aluvión de ayudas proporcionadas por el Ejecutivo sin que, con el paso de los años, haya unos ingresos acordes a esta inversión.

Con Miquel Iceta al frente de la cartera cultural, en 2020 las subvenciones al cine español ascendieron a 47 millones de euros. En 2021 se incrementaron hasta los 60 millones, mientras que en el siguiente ejercicio siguieron aumentando hasta llegar a los 106 millones. Es decir, en apenas cuatro años, las subvenciones a nuestro cine han pasado de 47 millones de euros a 167 millones del 2023.

Unos datos que, según la hoja de ruta del Gobierno, seguirán creciendo. Recordemos que en 2021 Pedro Sánchez presentó el plan 'España, Hub Audiovisual de Europa', dotado con más de 1.600 millones de inversión pública hasta 2025.

Nuestro vecino, ejemplo a seguir

Si tenemos en cuenta los datos de Francia, el cine español y, concretamente, su rentabilidad, queda en entredicho. De hecho, nuestro vecino suele superar los 600 millones de euros de inversión pública en cada ejercicio. Una cifra realmente elevada si no fuera por los generosos ingresos que suele conseguir el sector cinematográfico francés.

Y es que tal como establece Comscore France, Francia recaudó a lo largo del año pasado 1.300 millones de euros por sus películas –con más de 200 millones en salas internacionales–, una cifra que no ha parado de crecer desde la pandemia y que demuestra dos cosas: la superioridad cinematográfica francesa que hay con respecto al cine español y, sobre todo, la gran diferencia en la gestión de ambos gobiernos con respecto a su cultura.